21 ene. 2025

Otros impactos del coronavirus

René González Ramos – @ram0srene

Por primera vez en mucho tiempo parece que un Gobierno toma una buena decisión al aplicar la medida sanitaria que obliga a limitar los eventos masivos ante los casos de coronavirus que ya están en territorio nacional.

Suspender las clases, los conciertos y los partidos de fútbol con público son también medidas claramente técnicas y no fruto de decisiones partidarias.

Por eso también es mejor que las personas que solo están en sus cargos por parentesco, como el ministro de Hacienda, Benigno López, hermano del presidente Mario Abdo, de ser posible, no emitan demasiadas opiniones sobre estos temas. Pero eso merece un comentario aparte.

Ahora lo que queda es pensar en otras aristas y buscar planes para toda la gente que se ve afectada en su bolsillo ante esta pandemia.

Obviamente, no hablamos de la industria farmacéutica ni de los empresarios de supermercados, que van ganando en lo económico.

La primera aglomeración de gente tras el anuncio de restricciones se dio en supermercados. Llueven denuncias de la ciudadanía sobre aumentos excesivos en productos como alcohol en gel en las farmacias.

Con la suspensión de eventos de masiva concurrencia muchas familias que dependen de jornales quedan sin el sustento por dos semanas como mínimo.

Vendedores de chipas, bebidas en general, panchos o asaditos que se ubican siempre en los alrededores de los estadios de fútbol y de los eventos culturales de masiva presencia están afectados en su economía ante este mal global.

Por otro lado, están los pobladores de San Ignacio, Misiones, cuya economía gira en torno al gran festival de Tañarandy, ahora cancelado.

Están los músicos que viven de los conciertos en vivo y los actores y cineastas cuyas obras se reproducen en salas de cine y de teatro.

¿Qué puede sugerirse como alivio económico para todas las familias que dependen del arte y de los eventos deportivos para el día a día?

¿Qué planes o proyectos se pueden plantear para estos casos?

¿Está pensando el ministro de Cultura, Rubén Capdevila, en todos los artistas cuyos eventos fueron suspendidos?

Quizás se puedan analizar programas de mediano y largo plazo una vez que terminen los bloqueos.

Lo que se me ocurre es organizar actos en cualquier espacio cerrado o público para que los artistas puedan recuperar algo de lo perdido durante la cuarentena.

Salud Pública ya anunció medidas de prevención y de acción en conjunto con otros organismos públicos que requieran de asesoramiento.

En el MEC prometieron tareas a través de la web como primera medida para recuperar las clases.

Igual, como sugiere la Unesco, hay que pensar del mismo modo en otro tipo de soluciones, teniendo en cuenta que no todos los chicos y chicas acceden a internet en sus casas o barrios.

Hablando del ámbito escolar, en esta cuarentena se suman los niños y jóvenes que en muchos casos se ven afectados porque dependen de la escuela pública para obtener alimentación escolar (merienda y almuerzo). Ahora que quedan sin la provisión de, por lo menos, esas tres chipitas que ofrece el MEC en la merienda escolar, ¿qué se puede plantear a modo de solución?

La Unesco remarca que en contextos de desigualdad, quienes más pierden con la pérdida de clases son los niños y niñas en situación de vulnerabilidad, más allá de lo acertado de la decisión en el caso de nuestro país.

De acuerdo con el organismo, uno de cada cinco estudiantes de todo el mundo está sin clases ahora mismo debido a la pandemia del coronavirus. En el país, son 1.500.000 estudiantes sin clases.

Así como se tomó la decisión correcta con las restricciones, esperamos que desde el Estado se tomen más acciones para mitigar el impacto negativo que traerá en lo económico para cientos de miles de familias.