En uno de los rodados, una camioneta Ford, propiedad del hombre de nacionalidad alemana, se encontraron vestigios de sangre, que serán analizados para determinar a quién corresponde.
Otro punto que llama la atención de los investigadores es que en la mañana en que Yuyu (como se conoce a la niña en el círculo íntimo) desapareció de su casa, el hombre salió en dos ocasiones con su camioneta.
Una vez, fue a una ferretería y en otra tardó unos 45 minutos para volver a la casa. Se analizan varios circuitos cerrados de la zona.
Las declaraciones de un peón de la familia de Juliette ante la Fiscalía refiere a una cierta mala relación y poca tolerancia por parte del padrastro con su hijastra. “Se impacientaba rápido con la niña”, explicó una fuente de la investigación.
El relato coincide al de una niñera de la niña, que declaró sobre ciertas ocasiones en que el padrastro de la menor se refirió de manera despectiva hacia ella.
La madre y el padrastro de la menor ya no hablan con los investigadores y solamente se comunican con ellos por medio de su representante legal, el abogado Max Narváez Matto.
LA FE DEL ABUELO.
El abuelo de Juliette, Rufino Zapata, manifestó el mal momento que están viviendo, pero que tiene la esperanza de encontrar sana y salva a su nieta.
Indicó que su hija, madre de la pequeña, en todo momento le recalca que en la mañana en que se perdió su hija estaba limpiando la casa y la menor jugaba con las cabras en un sector del patio.
Rufino hizo mención a los animales que desaparecieron en su momento junto a la niña, que fueron encontrados sanos. “Los animales aparecieron dos días después de la desaparición de mi nieta, a 10 kilómetros; no tenían hambre, ni sed y estaban limpios”, precisó.
Al ser consultado sobre el trato que había entre la actual pareja de su hija y su nieta resaltó que en ningún momento vio al hombre tratar mal a la pequeña.
La hermana mayor de Yuyu, de 10 años, declaró ayer ante el Ministerio Público. Fue ante una especialista en sicología de la Fiscalía, en una cámara Gessell y con la presencia de la madre. Anoche, la menor viajó a Francia a reencontrarse con su padre biológico que también es progenitor de Juliette.
El Padrastro. El padrastro de Juliette dijo a través de un traductor que su gran pregunta es ¿“cuál es el objetivo detrás de todo esto? No entiendo el enfoque y la agresividad contra mi persona,” manifestó.
Luego subrayó diciendo que es como de la familia, y que no existe denuncia alguna de parte de la madre de Yuyu hacia él.
PEDIDO DE IMPUTACIÓN.
Lourdes Servín, de la Asociación Ni Un Niño Más, indicó que están siguiendo el caso de cerca y piden a la Fiscalía que impute tanto a la madre como al padrastro de la niña. “Es una situación compleja y muy sospechosa. Se debe hacer una investigación exhaustiva. Más que nada, porque tenemos información de que la madre tiene forma de irse del país”, expresó.