El Gobierno hasta el momento no dio respuestas positivas a la posibilidad de proveer al país numerosas dosis de la vacuna Sinovac, de procedencia China. El jefe del Ejecutivo, Mario Abdo Benítez, hizo un paréntesis al respecto en una conversación con los medios que mantuvo este martes en el Palacio de López.
“No tenemos problemas de comprar (la vacuna) de donde sea. Ahora, no vamos a aceptar ningún tipo de chantaje para compra de vacunas, pero pedimos y estamos abiertos a tener trato directo con las fábricas en China, sin ningún tipo de condicionamiento con respecto a nuestras relaciones diplomáticas”, apuntó el jefe de Estado.
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El presidente de la República negó que las relaciones con Taiwán hayan influido en dicho aspecto y no descartó la provisión de biológicos que ofreció Cuba. Sobre este último punto, solo mencionó que desde el Ministerio de Salud Pública se están haciendo todas las exploraciones pertinentes.
“Nada se descarta y vamos a seguir avanzando sobre la posibilidad de tener la mayor cantidad de vacunas lo más pronto posible y vamos a explorar todos los mercados”, remarcó.
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En cuanto a la vacuna Sinovac, negociadores de la Cámara de Comercio Paraguay-China, argumentaron que los diálogos con la cartera sanitaria quedaron estancados luego de dos negativas presentadas por el Gobierno tras la renuncia de Julio Mazzoleni al cargo de ministro de Salud.
Paraguay no tiene aún relaciones políticas con la República Popular China, pero sí puede establecer relaciones económicas por medio del sector privado, según explicó el director de la Cámara, Jorge Martínez.
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El Ministerio de Salud enfrenta un proceso lento de vacunación, debido a que el Gobierno recibió apenas 183.000 dosis de vacunas contra el Covid-19 hasta el momento, conseguidas mayormente a través de donaciones de diferentes países aliados.
La situación preocupa a las autoridades de Salud Pública y al personal de blanco, que a su vez se encuentra agotado por la cantidad de pacientes que acuden en estado de gravedad a los hospitales.