El procurador general de la República, Marco Aurelio González, se refirió a las negociaciones que se están dando con el Mecanismo Covax, que plantea emitir las vacunas faltantes o que Paraguay pague un monto, sumado a lo que se dio como adelanto.
“Covax, ante un incumplimiento de su parte, no puede exigir una contraprestación por parte de nadie”, afirmó el procurador en conferencia de prensa e indicó que están abiertos al diálogo, “pero sobre la base de una alternativa que respete los derechos de todos los paraguayos”.
Asimismo, el procurador sostuvo que no se descarta ir “al arbitraje, en Ginebra, si es que no llegamos a una solución satisfactoria”.
Ante la consulta sobre si buscará deslindar responsabilidades con respecto a las autoridades que suscribieron el convenio, González respondió que ahora están abocados a llegar a un acuerdo con Covax y en “hacer prevalecer la Constitución (Nacional)”; no obstante, dijo que una vez que se llegue a una solución, “se van a exigir las responsabilidades”.
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El 14 de setiembre es la fecha límite para encontrar una solución con Covax, “que pretende rescindir el contrato de mutuo acuerdo y llegar a una salida acordada”.
Reiteró que desde el Gobierno “consideramos que Covax no puede imponerle a Paraguay situaciones injustas y que evidentemente son abusivas en el marco del relacionamiento que tuvieron con nosotros”.
Exigen la devolución del saldo
El procurador explicó que dentro del convenio firmado Paraguay tenía dos opciones: pagar solo por las vacunas que recibió o hacer un depósito para asegurar un acceso más rápido y a un precio menor.
Paraguay, durante el gobierno de Mario Abdo Benítez, pagó aproximadamente USD 6 millones por tres millones de dosis contra el Covid-19, de las cuales solamente recibió un poco más de un millón de dosis que se descontaron del depósito anticipado que realizó el país.
“Como a Paraguay solamente se le descontó el costo de un millón de dosis, tiene un remanente de aproximadamente USD 5 millones como saldo a su favor dentro de la cuenta del mecanismo Covax”, señaló.
Ese sobrante es lo que busca recuperar el país y rechaza el resto de las vacunas que Covax tenía que haber enviado durante la emergencia sanitaria.
“Entonces, la lógica del contrato es que nosotros anticipemos el dinero y que ellos nos devuelvan con vacunas, en pandemia. Nosotros estamos reclamando que una solución justa, lógica y jurídica es la devolución del dinero”, sostuvo.
Paraguay firmó un contrato “leonino”
A su turno, la ministra de Salud, María Teresa Barán, manifestó que Paraguay confió en que Covax iba a dar las vacunas ante la emergencia sanitaria, pero “recibió de este mecanismo una respuesta tardía e insuficiente”.
Barán sostuvo que “el mecanismo Covax fue un fracaso total “ y su ineficiencia “tuvo como consecuencia la pérdida de vidas humanas, causando muchísimo dolor a muchísimas familias paraguayas”.
Rechazó rotundamente que ahora que terminó la emergencia el mecanismo ofrezca “a destiempo entregar la totalidad de las vacunas, que son más de tres millones de vacunas, lo cual nos ocasionaría mayor gasto para su disposición final, por lo que el Ministerio de Salud decide rechazarlas”.
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Cuando se le consultó si había la posibilidad de cambiar las dosis por otras, respondió que “no” y que “tenemos que Paraguay firmó un contrato y de repente ese contrato es bastante leonino en contra de nuestro país, y por eso hoy estamos aquí”, afirmó.
“El dolor que causaron las ineficiencias de Covax es irreparable y eso es inadmisible para nosotros hoy”, finalizó.
Planteamiento de Covax
La primera propuesta de Covax consiste en que Paraguay pague cerca de USD 180.000, más los USD 5.600.000 aproximadamente que Paraguay tiene depositados como saldo.
El otro planteo del mecanismo es que el país pague USD 33.000.000 y reciba el resto de las vacunas que había solicitado.
