En este contexto, destaca que Paraguay mostró el aumento de deuda más elevado en el periodo comprendido entre junio de 2019 y junio de 2020, alcanzando un nivel levemente superior al 8% del producto interno bruto (PIB), por sobre las cifras de Brasil, Perú, Chile, Colombia y Argentina, conforme con las estadísticas oficiales de cada uno de los países (ver infografía).
Carlos Fernández Valdovinos, ex presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), explicó que esto refleja que nuestro país fue el de mayor esfuerzo fiscal de la región en el marco de la emergencia, lo cual es positivo, pero consideró que, por lo menos en el corto plazo, se debe dejar de asumir compromisos y optar por la reasignación de los recursos disponibles para hacer frente a las necesidades. “Ojo de acá para adelante, porque nos hemos endeudado bastante”, refirió.
Igualmente, aseguró que el Gobierno deberá decidir qué programas o planes financiar por ahora, ya que es imposible conseguir recursos para todo. “Va a tener que hacerse una selección. Por ejemplo, vamos a poner para Pytyvõ 2.0 o vamos a darle más recursos a Fogapy, que tiene fondos todavía para seguir dando. Va a tener que ser una elección, desagradable, pero una elección al fin. Por el momento, no más deudas, reevaluemos esto para el Presupuesto 2021 y usemos lo que tenemos disponible”, expresó.
SOSTENIBILIDAD. Durante el evento Basanomics, Santiago Peña, ex ministro de Hacienda, indicó que el problema radica en la velocidad del endeudamiento de Paraguay y que en ese sentido se alcanzó actualmente un nivel que califica de “no sostenible”.
“Tenemos que tener cuidado a partir de ahora”, manifestó, al tiempo de agregar que si se mide el indicador del pago de intereses con relación a los ingresos tributarios, este se ubicaba históricamente por debajo de lo considerado prudente –entre 7% y 10%– por el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero que hoy día se tiene una tendencia distinta.
Caída del PIB del 3% e inflación menor al 2%
Una baja del producto interno bruto (PIB) de 3%, con una inflación que no llegará al 2% y un déficit fiscal del 6% son las últimas proyecciones brindadas desde Basanomics para el cierre de 2020. De acuerdo con los cálculos, en el segundo semestre de este año la agricultura será clave para evitar una reducción más pronunciada, pero de todas formas existe una fuerte desaceleración del consumo, además de un duro golpe para el comercio de frontera.