“Después de décadas, Paraguay retomará el control de su espacio aéreo”, anunció el mandatario en redes sociales.
Señaló que los aviones con tecnología de punta serán esenciales para fortalecer la defensa aérea “y enfrentar con firmeza al narcoterrorismo”.
“Esta decisión refleja nuestro compromiso inquebrantable con la seguridad y la soberanía nacional. No cederemos en esta lucha; enfrentaremos cada desafío con toda nuestra fuerza y determinación”, aseveró.
En el mes de julio pasado, mediante un decreto, el presidente aprobó la compra de seis aviones Embraer Super Tucano para el combate al crimen organizado.
La inversión será de casi USD 100 millones que forma parte de un paquete de USD 500 millones que el presidente Santiago Peña anunció para la defensa nacional.
En ese sentido, se publicaron los decretos para que el Ministerio de Defensa, mediante las Fuerzas Armadas, realice la adquisición por vía de la excepción y el Ministerio de Economía inicie las gestiones para el financiamiento del proyecto.
Ya en febrero pasado, el general Julio Fullaondo, comandante de la Fuerza Aérea Paraguay, explicó que ese dinero invertido permitirá tener seis aeronaves A-29 Super Tucano, armamentos, entrenamiento de personal y la revitalización de otras seis aeronaves AT-27 Tucano, con las que cuentan actualmente, destinadas al control del espacio aéreo. Estas aeronaves de guerra cuentan con ametralladoras punto 50, misiles, bombas y cohetes.
USD 100 millones aproximadamente es el monto del contrato de préstamo para la compra de los seis aviones Super Tucano.