Peña indicó que no quiere adelantar su posición sobre la ley. “El presidente se expresa a través de decretos y leyes, cuando llegue van a saber mi posición”, aclaró.
Una vez que llegue la ley a la presidencia, el plazo para promulgar o vetar es de 20 días por la cantidad de artículos que tiene.
El senador Natalicio Chase, jefe de bancada de Honor Colorado, sorprendió con la explicación de por qué el documento no fue enviado. Indicó que hubo un error administrativo que no tiene nada que ver con la voluntad de los senadores.
Específicamente mencionó que no fueron firmadas dos hojas del proyecto, por lo que esperan el retorno de Taiwán de Basilio Núñez, presidente del Congreso, para hacer las correcciones.
Las presiones en torno a la ley motivaron al oficialismo a recurrir a esta maniobra para retrasar la decisión del Poder Ejecutivo.
El diputado de Fuerza Republicana Mauricio Espínola reclamó que la indecisión del presidente esté generando zozobra en la ciudadanía, ya que la ley coarta la libertad de muchas personas. Pidió el veto. “No deje en zozobra a la ciudadanía, presidente, con la decisión de vetar totalmente la ley antioenegé. Sea sensible y tenga en cuenta que este es un proyecto que puede afectar a la libertad de las personas y que mucha gente está pendiente de su decisión”, expresó.