En su rendición de cuentas, Peña destacó sus logros en 7 ejes claves como materia económica, justicia social, agrarismo, defensa nacional y seguridad, la soberanía energética, la moral ética y pública y soberanía y patriotismo.
Casi al término de su alocución, el jefe de Estado se refirió a la lucha que emprende su Gobierno contra la corrupción y el crimen organizado. Apeló al diálogo con otros Poderes del Estado para hacer frente a este flagelo, que según dijo, perjudica a todos los sectores.
“Resulta necesario que en este gobierno nos encontremos en un constante espacio de diálogo, de reflexión e intercambio sobre los desafíos y retos que enfrentamos como país, buscando en el marco de nuestra diversidad de opiniones y de experiencias, una “confluencia de voces” que nos permita construir, todos juntos, un futuro mejor. Dentro de esos problemas encuentran los tremendos desafíos está la lucha contra la corrupción. La corrupción es un mal endémico, perverso, que se asemeja a la Hidra de la mitología griega: Cada vez que la atacamos, cada vez que parece que la derrotamos, cada vez que le cortamos la cabeza, parece que crece otra, en otro lugar, con mayor fuerza. De ahí la importancia de dialogar y debatir francamente sobre ella. Es que la corrupción perjudica a todos los sectores, pero especialmente a los más vulnerables. Es una enfermedad que corroe el tejido social. Consciente de ello, mi gobierno ha decidido embarcarse en una lucha frontal contra la corrupción desde –casi literalmente– su primer día, o mejor, su primer fin de semana para ser exactos, al invitar a los otros poderes del Estado a sumarse a esta titánica tarea en un esfuerzo común y conjunto”, sostuvo.
“Una verdadera lucha contra la corrupción requiere de una acción colectiva, en la que participen todos los estamentos de la sociedad. Resulta imperioso el establecimiento de una política pública que sistematice y coordine el combate a la corrupción”, acotó.
Mencionó que los desafíos de la defensa y seguridad nacionales ya no se limitan a conflictos entre naciones, sino que implican conflictos internos que requieren una coordinación entre todas las Instituciones del Estado, así como una relación de apoyo mutuo entre países para hacer frente a amenazas comunes, como el crimen organizado, el cibercrimen, el terrorismo, el tráfico de personas”, dijo.
Como casi todos los eventos que se realizan en la Junta de Gobierno de la ANR en hora pico, el caos en el tránsito y las constantes quejas de los automovilistas esta vez no fueron la excepción. La presencia del mandatario Santiago Peña hizo que se redoblara la seguridad en el lugar, que de por sí ya parece un búnker. Cientos de efectivos de la Policía Nacional escoltaban el local partidario desde tempranas horas y a eso se le sumó la presencia de militares, quienes con armas largas intimidaban a todo aquel que pasara cerca. Un grupo de trabajadores de Copaco pudieron acercarse frente a la Junta de Gobierno con el fin de protestar por la falta de cobro de sus salarios. Pidieron a Peña que interceda en esta situación. El presidente de la ANR Horacio Cartes y el ex senador Galaverna agradecieron a Peña por su presencia.