El presidente aseguró que tuvo resultados positivos porque logró lo que nunca nadie y pudo reunirse con unos 50 legisladores y parte del gabinete en cuatro días, además de obtener el compromiso de Marco Rubio de priorizar Paraguay. El secretario de Estado fue quien visitó a Peña en su hotel.
“Nosotros estamos en el negocio de que el presidente tiene que tratar de hacer la mejor gestión posible y la oposición tiene que hacer el trabajo de tratar de que no haga una buena gestión, es una competencia sana. Me encanta la competencia. No podemos bajo ninguna circunstancia acallar la crítica”, lanzó.
El presidente afirmó que su misión junto con Pedro Alliana es transformar el país, por lo que optó por hacer cosas diferentes y no lo mismo de siempre. Indicó que no desconoce los problemas de salud, educación, empleo e infraestructura a nivel nacional, pero que son asuntos que puede resolver, sin que el Paraguay deba aislarse.
“Entonces tomamos la decisión de irnos allá donde nunca antes nadie se fue, para conseguir aquello que nunca antes se consiguió, que es posicionar al Paraguay como lo que es, el mejor país del mundo. El que sabe cuál es su rumbo no se detiene, y nosotros no nos vamos a detener”, subrayó.
El presidente dejó en claro que su visita a Washington se basó en la importancia de ser parte de un hecho histórico, como lo es la llegada de un nuevo gobierno, que significará el mayor cambio en la historia de la economía más grande con sus vecinos de Latinoamérica. “Vamos a ver el mayor cambio en las relaciones entre América Latina y EEUU y esto va a tener un impacto que va a sobrepasar a nuestro continente, va a tener connotaciones a nivel mundial, y yo quiero ser parte de ese cambio y quiero que Paraguay sea un protagonista, no un observador”, sentenció.
Por ese motivo, insistió en no responder a la oposición, que además criticó al presidente por el caso de la entrega de dinero en termos a seccionaleros, y les pidió seguir su propia agenda y no la del partido.
Aseguró que en 2023 no hubo tantos viajes porque Mario Abdo se ocupó de su candidatura a presidente de la ANR y luego todo se trató de la campaña electoral. Sin embargo, en 2024 la agenda del gobierno fue ambiciosa a nivel internacional que logró el grado de inversión y la declaración de la guarania como patrimonio cultural internacional. “La gente se encarga de hacer la referencia al Santi Tour que sale a recorrer el mundo. No hay ningún secreto, tengo una agenda internacional muy activa y la seguiré teniendo. Tomamos la decisión de venir a cambiar, hemos pasado más de 100 leyes (…). No nos enojamos de la crítica, no se enojen de nuestras determinaciones”, concluyó.
Santiago Peña defendió su agenda internacional y al citar lo que considera sus logros, aseguró que Paraguay está a días de dirigir la Organización de Estados Americanos (OEA). El presidente se refirió a la postulación del canciller Rubén Ramírez Lezcano a la secretaría general de la OEA, pero ante la consulta de si sus expresiones tenían que ver con que ya contaba con todos los votos, respondió que todavía faltaba entrar al juego. “En los papeles todo está, pero hay que jugar el partido”, lanzó. Peña aseguró que no piensa dejar que el relato que se construye dentro del país sea el que se muestre al mundo, por lo que decide salir a posicionar al Paraguay, una inversión que será su legado para otros gobiernos.