06 oct. 2024

Peña pidió eliminar barreras y hubo tensión de Lula y Lacalle con Milei

El malestar contra el argentino, su modelo y su ausencia marcaron la Cumbre del Mercosur. Paraguay destacó su avance con Emiratos, solicitó menos trabas y Uruguay ya apunta a China.

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Cumbre. Las autoridades del Mercosur lograron una declaración conjunta en Asunción.

Dardo ramírez

La Cumbre del Mercosur concluyó con total sintonía entre sus miembros e incluso la adhesión de un nuevo país, Bolivia, y el interés de Panamá de formar parte del bloque. Pero hubo una excepción, y fue la marcada diferencia con Argentina, que fue notoria en los pronunciamientos de Brasil y Uruguay, y en el proceso de elaboración de la declaración conjunta, para la que fue difícil llegar a un acuerdo en la redacción de algunos artículos.

Las molestias de Lula da Silva con Javier Milei vienen de antes del encuentro en Asunción. El argentino lo tildó públicamente de corrupto y luego se ausentó en la Cumbre, para reunirse con Jair Bolsonaro. También acusó a Luis Arce de montar un golpe falso en La Paz y envió a la canciller Diana Mondino, en un desaire a la primera presidencia pro tempore de Santiago Peña.

El presidente de Brasil evidenció su tensión con Milei en su intervención, pidió no revivir el modelo ultraliberal y advirtió sobre las desventajas de un libre mercado. Sostuvo que el Mercosur “nunca antes” había enfrentado desafíos como los actuales.

“Democracia y desarrollo van de la mano. Los buenos economistas saben que el libre mercado no es una panacea de la humanidad, los que conocen la historia de América Latina reconocen el valor del Estado como planificador e inductor del desarrollo. En un mundo globalizado no hay ningún sentido de recurrir a nacionalismos arcaicos y ais-lacionistas, tampoco se justifica revivir los experimentos ultraliberales, que solo han exacerbado las desigualdades en la región”, apuntó Lula.

Tanto Lula como Luis Lacalle Pou condenaron el intento de golpe en Bolivia, lo que obligó luego a Mondino a estar en sintonía. Para el brasileño, este caso debe poner a todos en estado de vigilancia. “Hay que permanecer vigilantes. Falsos demócratas intentan socavar las instituciones y ponerlas al servicio de intereses reaccionarios. Mientras nuestra región siga figurando entre las más desiguales del mundo, la estabilidad política estará amenazada”, advirtió.

El desinterés de Milei hacia la región es claramente la molestia principal. El libertario negocia de forma individual con empresas de otros países. “No veo ninguna contradicción en participar de la economía mundial y cooperar entre vecinos”, comparó Lula.

Lacalle Pou recibió la presidencia pro tempore, que llevará por seis meses, y así como anunció que abrirá diálogo con China, fue directo en denunciar a Milei por su desinterés y ausencia. “No solo importa el mensaje, es muy importante el mensajero. Si el Mercosur es tan importante, acá deberíamos estar todos los presidentes. Yo le presto importancia al Mercosur”, subrayó.

Por su parte, Peña se apartó de las tensiones y prefirió centrarse en pedir el respeto a la democracia y resaltar los objetivos del país con el bloque, basados en el comercio y en la lucha contra el crimen trasnacional. Pidió eliminar las barreras comerciales para facilitar a Paraguay en su condición de país sin litoral. También habló de su interés en reactivar el Focem.

CLAVES DE LA CUMBRE DEL MERCOSUR Roces. Milei se ausentó de la Cumbre por sus sucesivos conflictos con los miembros del Mercosur. Acusó a Arce de un golpe montado, a Lula de corrupto y dejó plantado a Peña. Modelo. Lula pidió no revivir gobiernos ultraliberales, en alusión al modelo de Milei. En ese contexto, alertó de falsos demócratas. Lacalle Pou criticó el desinterés del argentino en la región. China. Peña entregó la presidencia pro tempore a Lacalle Pou y este adelantó que avanzará con China, pese a la oposición paraguaya. Traba. Peña pidió reducir trabas comerciales. Avanza con Emiratos.

Bolivia ya es miembro pleno La Cumbre del Mercosur fue histórica por la entrega de la ley de adhesión de Bolivia por parte de su presidente Luis Arce, quien promulgó la normativa luego de que fuera sancionada, la semana pasada, por la Asamblea Legislativa. Arce fue bien recibido como miembro pleno por todos sus pares, justo en medio de una crisis en su país tras un intento de golpe de Estado. El boliviano consideró que esta adhesión será beneficiosa para Bolivia. Con la entrega del documento, Bolivia tiene 30 días para su integración plena. Arce empezó con una mala relación con Javier Milei, quien lo acusó de montar el golpe, pero cuenta con el apoyo de Lula y el gran interés de Santiago Peña en llevar relaciones comerciales más avanzadas, centradas en el gas boliviano y otros intereses.

Esperan elecciones en Venezuela El ministro de Relaciones Exteriores, Rubén Ramírez Lezcano, informó que existen intenciones de levantar la suspensión de Venezuela como miembro del Mercosur, pero que se esperan las elecciones en ese país. Indicó que conversaron con los ministros de los distintos países sobre el proceso de elecciones y que habrá nuevas discusiones, porque se espera que los comicios sean transparentes, participativos y que el resultado sea aceptado, para volver a hablar de la posibilidad de reintegrar a Venezuela. “Atentos al proceso democrático en Venezuela, es un tema clave y muy importante”, expresó. Lezcano comentó que también reabrieron negociaciones con Japón, que considero una puerta de entrada a Asia, y que este año cierran con Emiratos Árabes Unidos, con el que en la semana se reunieron.

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