Luego de un año de estar sin hogar estable, Brodie –una mezcla de border collie y pastor alemán– encontró una familia que lo acepte tal y como es. El caso del animal se volvió viral tras conocerse su historia de supervivencia.
El perro de un año fue atacado por su madre cuando tenía solo 13 días de vida. A raíz de ello, el Brodie quedó con graves deformidades en la cara y en el cráneo.
Nació en el refugio canadiense Old MacDonald Kennels y, pese a los tratamientos, su mandíbula creció torcida y un lado de su cara se atrofió, lo que ocasionó que se quedara parcialmente ciego.
No obstante, no todo fue malo, su peculiaridad hizo que se convirtiera en un perro influencer con cientos de solicitudes de adopción. Fue así que una familia se quedó con él, pero, tras solo cinco meses, lo devolvieron porque era “demasiado hiperactivo”.
En el proceso de selección, Brodie se encontró con Amanda Richter y su pareja, Brad Ames, quienes dijeron que se “enamoraron a primera vista” de este peludo, informó 20 Minutos.es.
“Lo conocimos, nos lo llevamos a pasear, estuvimos unas horas con él y terminamos trayéndolo a casa el mismo día porque el refugio sintió que de verdad encajábamos muy bien”, explicó la mujer.
La pareja reconoció que el can es muy hiperactivo, pero inteligente. “Su cerebro está perfectamente bien y aprende trucos en 10 minutos, lo que quiere decir que es un chico inteligente”, señaló.
Los nuevos humanos de Brodie afirmaron que “el perro necesita paciencia y alguien que sea constante, ya que su conducta mejora cada semana”.
Su nueva y definitiva familia quiere entrenarlo para que sea perro de terapia “y que pueda ayudar a otros con discapacidad”. De hecho, que el perro, con casi 40.000 seguidores en Instagram, ya es todo un ejemplo de superación.