Con su “yunta” (amigo) compartieron 8 años de complicidad e investigaciones periodísticas. Zurita fue el escudero fiel de Villavicencio. Juntos expusieron los peores entramados de corrupción y resistieron embates judiciales y amenazas de políticos y criminales enojados por su trabajo.
Luego del magnicidio perpetrado por un sicario colombiano en moto a la salida de un mitin, Zurita fue designado para tomar el lugar de Villavicencio a una semana de la primera vuelta presidencial de hoy.
Siempre usando chaleco antibalas en público y con una mirada tranquila que se esconde detrás de unos grandes lentes, Zurita no ha tenido tiempo para volver al instante en el que Villavicencio murió, ni cuando fue elegido por la familia para reclamar su cuerpo.
“Fue indescriptible”, dice en una entrevista ahogando el llanto. Por 22 segundos se queda en silencio para evitar que se le escurran las lágrimas y se limita a soltar una frase: “Era mi amigo”.
Con su investigación maestra, los periodistas revelaron cómo el ex mandatario socialista Rafael Correa (2007-2017) y ex funcionarios de su gobierno pactaron apoyos económicos con empresarios para su campaña presidencial a cambio de entregarles contratos estatales.
El libro que revela las pruebas fue bautizado como “Arroz Verde”, el código que usaban los lobistas para pactar sobornos. AFP