26 abr. 2025

Pese a que Rivas obvió datos en su croquis, juez levantó la rebeldía

El forense que fue a Ybycuí para constatar el estado de salud del diputado llegó al lugar equivocado. El legislador se presentó ayer en medio de un gran despliegue de seguridad.

El diputado Tomás Rivas se presentó ayer ante el juez Raúl Florentín para levantar una orden de captura en su contra, al no poderse comprobar la veracidad de un certificado médico que utilizó para suspender una audiencia preliminar.

Ayer, luego de ponerse a disposición del juez, se supo que el legislador obvió algunos datos fundamentales para que el médico pueda llegar hasta su domicilio, en la localidad de Ybycuí, para inspeccionarlo, yendo el galeno equivocadamente a la casa del padre del diputado.

“Con toda mala intención, el médico forense fue a otra dirección, no a mi casa. Se fue a la casa de mis padres”, comentó brevemente Rivas, al salir de la audiencia con el juez, agregando que todo el procedimiento era parte de una farsa montada en su contra.

De esta manera, el político colorado negó que haya querido dilatar el proceso al no hacerse encontrar por el médico que acudió hasta la ciudad ubicada en el Departamento de Paraguarí para atenderlo.

El doctor Rosalino Pintos, encargado de realizar la tarea, cuando hizo su informe, señaló que Rivas no estaba cumpliendo con el reposo que había presentado como argumento para suspender el trámite judicial, al no encontrarse en el domicilio indicado, por lo que el juez ordenó su captura.

Jorge Bogarín, uno de sus abogados defensores, también responsabilizó al forense de la declaración de rebeldía del legislador colorado imputado, afirmando que este fue a la casa equivocada.

“El forense dijo que siguió la indicación de pobladores, cuando él lo que tenía que hacer es ir al domicilio que está indicado en autos. Hay un croquis, un domicilio que se denunció en el auto de imposición de medidas”, refirió el abogado.

Sin embargo, al acceder al documento judicial, se puede constatar que no existió tal croquis, sino que algunas referencias generales para llegar a la casa, como el nombre del barrio y otro dato que señalaba que quedaba en el camino que va a Mbuyapey.

La dirección fue señalada de puño y letra por Rivas, en el momento en que tuvo su audiencia de imposición de medidas, el pasado 30 de julio.

Luego de disipar la supuesta confusión, el parlamentario llegó hasta el Palacio de Justicia y, esta vez, se sometió a un control por parte de otro médico forense.

ENFERMEDAD. Según explicó el juez de la causa, el médico, en su informe, certificó que el legislador efectivamente padece de una dolencia renal y de infección en la vía urinaria.

“La declaración de rebeldía parte del reposo médico. Si era falso, sí es una conducta obstruccionista, pero se confirmó que estaba enfermo”, afirmó el magistrado, que no quiso precisar si el diputado mintió o no al elaborar la dirección de su casa.

El juez Florentín determinó que Rivas debe seguir gozando de medidas alternativas a la prisión, imponiendo una fianza real de 100 millones de guaraníes, que es el valor de un automóvil, y otras reglas que debe cumplir.

Tomás Rivas está imputado por cobro indebido de honorarios, estafa, expedición y uso de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso luego de una investigación realizada por el periodista Fernando Boccia para ÚH, que en sus publicaciones reveló el supuesto pago de salario a sus caseros con dinero público.