El Ministerio de Hacienda presentó ayer su Rendición de Cuentas 2022 en una audiencia pública realizada en el Salón Abierto. Del evento participaron el ministro de Hacienda, Óscar Llamosas; los viceministros Marco Elizeche (Administración), Iván Haas (Economía) y Óscar Orué (Tributación); y referentes del sector privado.
Tras exponer acerca de los logros, los puntos a mejorar y los principales desafíos en el corto y mediano plazo, la cartera que lidera el Equipo Económico Nacional dio a conocer un reporte preliminar sobre el avance del Presupuesto General de la Nación (PGN) 2023 en el Congreso, luego del cierre de la primera vuelta del circuito legislativo en Senado.
El documento da cuenta que el plan de gastos del Estado alcanzó los G. 105,3 billones (USD 14.843 millones), lo que implica que se ha inflado ya en G. 175.000 millones frente a la versión del Ejecutivo, con un aumento en la estimación de ingresos tributarios por G. 184.000 millones (ver imagen).
Esto último, según el viceministro Elizeche, es en realidad un desfinanciamiento, porque es una sobreestimación de recaudación que no responde a las proyecciones estadísticas, de variación del PIB ni del tipo de cambio.
El informe indica además que, entre lo aprobado en Diputados y Senado, el Congreso terminó en primera vuelta abultando el gasto salarial en G. 348.000 millones (USD 50 millones). En ese sentido, revela que se han aprobado reajustes y aumentos en bonificaciones y gratificaciones en entes como la Corte, UNA, Salud, Congreso y Mades, entre otros.
A días de las elecciones internas partidarias y ya con la mente puesta en una repartija de cargos de cara a las generales de abril, ambas cámaras han autorizado el nombramiento de 2.900 personas. De ese total, 1.348 son nuevos puestos propiamente y el resto son desprecarizaciones; es decir, confirmación de forma permanente a contratados.
A esto se suma el hecho de que los congresistas han restado ingresos a la inversión pública provenientes del endeudamiento, reasignando esos recursos al rubro de los servicios personales, aunque no se sabe con precisión aún el monto específico.
ALERTA. El ministro Llamosas y el viceministro Elizeche se mostraron muy preocupados por los cambios que introdujo el Congreso al PGN 2023.
Resaltaron que estos USD 50 millones se podrían duplicar o triplicar en los próximos años, debido a que gran parte de los aumentos y creaciones de cargo para el 2023 se implementarán en los últimos meses, teniendo un impacto de año completo recién desde 2024. Esta situación, alertaron, no solo implicaría cada vez menos margen de maniobra para el Tesoro, sino que arriesga la vuelta del déficit al 1,5% del PIB, como establece el plan de convergencia fiscal.
La cartera espera el cierre que debe hacer la Cámara Alta sobre el monto final del plan de gastos y las reasignaciones, tras lo cual deberá tomar una decisión sobre cuál versión acompañará en segunda vuelta. No obstante, tiene aún en carpeta la posibilidad del veto parcial.
Tras su estudio en Senado este martes, el PGN 2023 volvió a Diputados para el inicio de la segunda vuelta. La Cámara Baja tiene hasta el 10 de este mes para ratificarse en su versión inicial o aceptar los cambios introducidos al proyecto por la Cámara Alta.
Inflado. El reporte de Hacienda muestra cómo se incrementó el PGN 2023 en el Congreso.
Destacan nota y desempeño fiscal
Durante la audiencia pública, las autoridades de Hacienda hicieron énfasis en los logros obtenidos durante este 2022.
El viceministro Haas indicó que en medio de una difícil coyuntura por la pandemia y sequía, el Paraguay no solo mantuvo su calificación, sino que Moody’s resolvió mejorar la perspectiva crediticia, ubicándonos a un paso del grado de inversión.
El subsecretario Orué, por su parte, destacó la ampliación de la base tributaria, cerrando octubre con 1.400.000 contribuyentes por primera vez. Asimismo, resaltó la recaudación adicional que se ha logrado tras la reforma del 2019, convirtiendo al sistema en uno más equitativo.
Por su parte, Marco Elizeche enfatizó en el esfuerzo del Tesoro para atender a los sectores más vulnerables y los aumentos en la asignación de fondos para entes sensibles como Salud, Educación y Obras.
Finalmente, coincidieron en la necesidad de seguir impulsando reformas estructurales, de modo a garantizar un crecimiento sostenible y un mejor uso del dinero del contribuyente.