15 nov. 2024

PGN: Escenario actual prevé más de lo mismo en 2023

Si bien todavía no hay información sobre el anteproyecto de Presupuesto 2023, todo indica que este importante instrumento para el desarrollo del país y la calidad de vida de la población continuará arrastrando sus históricos problemas. La ralentización económica convertida en crisis después de la pandemia, la guerra entre Rusia y Ucrania, los sucesivos eventos climáticos, el estancamiento de los indicadores sociales y económicos no han logrado incluir cambios sustanciales en las políticas públicas en los últimos años, por lo tanto no habría que esperar que el Presupuesto presente algún tipo de modificación estructural. La situación empeora si consideramos este año pre-electoral, la persistencia de un servicio civil partidizado y el arraigado prebendarismo.

Paraguay está cambiando aceleradamente en todos los ámbitos. El bono demográfico se empieza a agotar mientras que el envejecimiento de la población impone complejidad, dado que gran parte del Estado paraguayo se ha centrado más en la niñez que en cualquier otro grupo etario. Aun así, el esfuerzo ha sido tan bajo que actualmente casi la mitad de los niños, niñas y adolescentes sufren algún tipo de carencia ubicándolos en pobreza monetaria o multidimensional.

Los rezagos en materia de infraestructura persisten. Establecimientos de salud y educación precarios, baja cobertura de agua, saneamiento y conectividad, importante déficit habitacional, amplias zonas sin caminos de todo tiempo, áreas urbanas con riesgos de colapso en días de lluvia.

En un contexto de atrasos con respecto a los países de la región se suma una crisis múltiple económica, sanitaria y climática requiriendo a los países medidas de manera a prevenir, mitigar y adaptarse.

El mundo debe iniciar profundas transiciones económicas, sociales y energéticas. Paraguay se ubica entre los países con mayores oportunidades debido a su estructura demográfica relativamente joven, a la disponibilidad de recursos naturales y a la producción de energía renovable.

El aprovechamiento de estas oportunidades depende de la acumulación de capital humano, ampliación de la infraestructura vial, económica, social y comunicacional que a su vez requiere reformas en todos estos ámbitos y, sobre todo, un mayor esfuerzo fiscal.

Estos grandes cambios a nivel nacional e internacional no están logrando transmitirse a las políticas públicas nacionales. El sistema tributario, educativo, sanitario, la infraestructura, el modelo económico deben ser objeto de transformaciones en el corto plazo de manera a que nuestro país se inserte en una economía global de manera resiliente y, sobre todo, garantizando mejores vidas a sus ciudadanos.

Sin cambios en la política pública tampoco habrá cambios en el Presupuesto público, lo cual genera profunda preocupación. Existen discursos en torno a la necesidad de romper la inercia en casi todos los ámbitos, pero si no se incluyen fondos para su implementación se convierten en aspiraciones, con una brecha muy amplia con respecto a la realidad.

Está de más señalar que un cambio interno imprescindible es el del servicio civil. Así como está el Presupuesto, la mayor parte de los fondos se destinan a financiar recursos humanos sin la vigencia de carrera civil y con un alto porcentaje de operadores y afiliados a un partido político. Igual de importantes son los cambios en las contrataciones públicas, caracterizadas por la falta de competencia en la oferta, mal manejo de contratos y la existencia de sobrefacturaciones, tráfico de influencia y conflicto de intereses. No se observan cambios en ninguno de los dos sentidos.

El Presupuesto público debe ser capaz de reflejar las necesidades y las transformaciones; sin embargo, lo que se prevé para el año 2023 es más de lo mismo, al contrario de las aspiraciones de los paraguayos, que esperan que en años de crisis el sector público cumpla con su rol.

Ojalá el escenario del statu quo cambie en las próximas semanas y autoridades fiscales y parlamentarios nos den una sorpresa positiva, pero al parecer no habría que esperar mucho.

Más contenido de esta sección
Las ventas al público en los comercios pyme de Argentina cayeron un 25,5% interanual en febrero pasado, golpeadas por la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores a causa de la elevadísima inflación, y acumulan un declive del 27% en el primer bimestre del año, según un informe sectorial difundido este domingo.
El mandatario decidió crear el fondo nacional de alimentación escolar esperando un apoyo total, pues quién se animaría a rechazar un plato de comida para el 100% de los niños escolarizados en el país durante todo el año.
Un gran alivio produjo en los usuarios la noticia de la rescisión del contrato con la empresa Parxin y que inmediatamente se iniciaría el proceso de término de la concesión del estacionamiento tarifado en la ciudad de Asunción. La suspensión no debe ser un elemento de distracción, que nos lleve a olvidar la vergonzosa improvisación con la que se administra la capital; así como tampoco el hecho de que la administración municipal carece de un plan para resolver el tránsito y para dar alternativas de movilidad para la ciudadanía.
Sin educación no habrá un Paraguay con desarrollo, bienestar e igualdad. Por esto, cuando se reclama y exige transparencia absoluta en la gestión de los recursos para la educación, como es el caso de los fondos que provienen de la compensación por la cesión de energía de Itaipú, se trata de una legítima preocupación. Después de más de una década los resultados de la administración del Fonacide son negativos, así como también resalta en esta línea la falta de confianza de la ciudadanía respecto a la gestión de los millonarios recursos.
En el Paraguay, pareciera que los tribunales de sentencia tienen prohibido absolver a los acusados, por lo menos en algunos casos mediáticos. Y, si acaso algunos jueces tienen la osadía de hacerlo, la misma Corte Suprema los manda al frezzer, sacándolos de los juicios más sonados.
Con la impunidad de siempre, de toda la vida, el senador colorado en situación de retiro, Kalé Galaverna dijo el otro día: “Si los políticos no conseguimos cargos para familiares o amigos, somos considerados inútiles. En mi vida política, he conseguido unos cinco mil a seis mil cargos en el Estado...”. El político había justificado así la cuestión del nepotismo, el tema del momento.