Mónica Castañé, madre de Belén Whittingslow, lleva 16 días encadenada frente al Palacio de Justicia exigiendo la anulación de la resolución de la jueza penal de Garantías Lici Sánchez, quien dictó la captura contra su hija, en la causa investigada a alumnos de la UCA por compra de notas.
“La causa está parada hace cuatro años. La orden de captura no debe seguir. No corresponde. Ella merece volver a su país y acá seguir su causa”, expresó en contacto con radio Monumental 1080 AM.
Castañé dijo que la vida de su hija es difícil, está con problemas de salud y que se siente abandonada por su país. “Ella está prácticamente hace cuatro años en Uruguay y siente que pisotearon sus derechos. Ella no puede estar feliz en una situación así, ella fue desarraigada”, prosiguió.
La mamá de Belén señaló que el pecado de su hija fue denunciar un caso de acoso sexual.
Whittingslow está refugiada en Uruguay tras la denuncia que realizó en el 2014 en contra del ex presidente del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) y docente de la Universidad Católica de Asunción (UCA), Cristian Kriskovich, por acoso sexual.
Lea más: Piden celeridad en revisión del caso universitaria refugiada
Kriskovich había alegado que el caso no fue un hecho de acoso, sino se trató de un simple “galanteo”. Mientras que la joven presentó conversaciones que supuestamente mantuvieron a través de WhatsApp, donde el docente le pedía mantener relaciones sexuales, según su denuncia.
Belén logró obtener refugio político luego de la desestimación de su denuncia por acoso sexual contra Kriskovich. La acción de inconstitucionalidad promovida por la defensa de la joven sigue sin resolverse.