Los Consejos de Desarrollos buscan el libre tránsito entre las tres ciudades espejo de la Triple Frontera. La intención es lograr la reapertura del paso a la Argentina, a través del puente Tancredo Neves, y replicar la experiencia entre las ciudades de Foz de Yguazú, Brasil, y Ciudad del Este.
La propuesta se impulsa tras la reapertura del Puente de la Amistad para buscar la reactivación económica de la región. Por causa de la pandemia, el puente Tancredo Neves, que une Puerto Iguazú con Foz de Yguazú, permanece cerrado hace más de ocho meses, así como el paso por balsa desde Presidente Franco.
El Comité Internacional de Crisis de Frontera dejó a cargo del Consejo de Desenvolvimiento de la Región Trinacional del Yguazú (Codetri), para definir una agenda de actividades tendientes a debatir pautas con autoridades de la Argentina y los demás países, para la reapertura de la frontera.
La intención es unir las tres ciudades al intercambio comercial, y aplicar las medidas sanitarias para evitar la propagación del coronavirus, a partir de la experiencia del libre tránsito entre las ciudades espejos del Paraguay y el Brasil. Esta semana se realiza la segunda reunión virtual entre los representantes de los Consejos de Desarrollo con representantes de instituciones federales de la Argentina. Los cónsules también son invitados, según lo publicado por Codefoz.
“Compartir las experiencias sobre medidas sanitarias y protocolo de seguridad, a partir de los acuerdos que tenemos para la reapertura del Puente de la Amistad. Somos una región trinacional, pero somos un solo destino; por eso estamos conversando con las autoridades tanto públicas como privadas, para trabajar juntos”, afirmó Linda Taiyen, del Codetri.
La Triple Frontera vive del comercio y del turismo, y las restricciones por causa de la pandemia golpearon fuerte, ocasionando quiebras de empresas o el cierre con millonarias pérdidas. Solo en Ciudad del Este, los comerciantes estiman que la pérdida ascendió a más de USD 500 millones.
Para Pablo Bauzá, del Codepi, es posible que a través del planeamiento se pueda abrir paso a paso la frontera, bajo las medidas de seguridad, así como se hizo con el Puente de la Amistad.
500 millones de dólares es la pérdida que estiman comerciantes de frontera, un impacto a causa de la pandemia.
45.000 personas quedaron desempleadas con el cierre de la frontera a causa de la pandemia del Covid-19.