Antonio Rolin
ITAPÚA
Las ciudades de Encarnación y Carmen del Paraná son el epicentro de la movida veraniega en el Departamento de Itapúa, donde converge gran parte de los eventos y actividades de veraneo. Con miles de turistas que se llegan a diario en estos puntos, la movida veraniega es intensa y variada con propuestas para todos los gustos y opciones de entretenimientos en todos los niveles.
Turistas de diferentes puntos del país, del departamento y del exterior, son habitués de los sitios turísticos de Encarnación y Carmen del Paraná, incluso varios europeos que llegan atraídos por la belleza del país y su principal atractivo, el clima.
Según los hoteleros, la ocupación de camas está en el orden del 80% entre semana y 95% los fines de semana, y las reservas son mayormente familiares o de grupos de amigos, ocupando gran parte de la capacidad los compatriotas que se llegan desde distintos puntos de nuestro territorio.
Cada día es una magnífica oportunidad para redescubrir Encarnación y sus principales atractivos, además de sus espectaculares playas que recibe a miles de veraneantes cada semana, lo que tiene a la hotelería casi al tope de su capacidad.
Paseos por los museos, sitios históricos, oferta gastronómica y hotelera de nivel internacional, conciertos al aire libre, shows, exposición de artesanías, recorrido en bicicleta o caminatas por la extensa costanera son solo algunas de las propuestas que tiene Encarnación para los turistas.
DESCONEXIÓN
Mientras para los amantes de un ambiente más tranquilo, Carmen del Paraná es uno de los mejores destinos del territorio nacional, con tres paradisiacas playas a orillas del majestuoso Paraná que en esa zona la bautizaron como el “mar paraguayo”.
Amplios espacios de esparcimiento, extensa Costanera y área verde, importantes sitios y reliquias históricas, modernos hoteles y confortables alojamientos, variada opción gastronómica, eventos y shows artísticos al aire libre, paseos en kayak, votes, vuelos en parapentes entre otros, son algunas de las propuestas que el visitante encontrará en esa ciudad situada por la ruta PY01 a unos 35 kilómetros de la capital de Itapúa.
En ambas ciudades hay eventos y actividades todas las semanas y durante toda la temporada estival cuando el visitante puede elegir a que evento concurrir o en qué ambiente disfrutar de una rica cena, un helado, un café, un tereré o simplemente disfrutar del imponente paisaje a orillas del rumoroso Paraná.
FUERA DEL AGUA
Si bien las playas son las atracciones principales para los visitantes, la ciudad de Encarnación cuenta con una variada agenda de eventos para los veraneantes y las actividades no solo giran en torno a las playas, sino que abarca diferentes sectores y ambientes de la ciudad.
A todo esto, se suma desde el próximo fin de semana el tradicional y espectacular “Carnaval Encarnaceno 2025”, que ofrecerá cuatro fines de semana llena de magia, ritmo, alegría y color, donde Encarnación estará en el centro de la movida nocturna. La mega fiesta carnestolenda del país se realizará los días 25 de enero, 1, 8 y 15 de febrero.
El Carnaval es el dinamizador económico más impactante de la ciudad de Encarnación, según afirmó el presidente de Club de Clubes, organizador del evento, Eduardo Florentín. Esta fiesta mueve unos USD 16 millones en diversos rubros en la ciudad, según un estudio que hizo la Universidad Nacional de Itapúa (UNI), con relación al impacto económico que tiene el carnaval en la ciudad.
Dicho estudio pudo corroborar que semanalmente se mueven USD 4 millones entre gastronomía, hotelería, comercios y otras actividades dentro de la cadena de prestadores turísticos, lo que multiplicado por cuatro semanas deja la cifra de USD 16 millones, impacto que permea en todos los niveles de la sociedad.
Paseos culturales y experiencias recreativas
Encarnación tiene opciones para todos los gustos. Los paseos guiados por la Costanera, los trayectos en kayak o en pontón, y el recorrido en el Open Bus son algunas de las actividades más populares entre los turistas. Además, el Parque Acuático El Dorado y la Escalinata San Pedro brindan diversión y vistas espectaculares. Para los amantes de la naturaleza, el Mini Zoológico Juan XXIII y el Parque de la Salud son visitas obligadas.
Los museos de Encarnación ofrecen experiencias enriquecedoras. El Museo Municipal Ferroviario está abierto de lunes a viernes de 07:00 a 17:30 y los fines de semana de 13:00 a 17:30. La Colección Hrisuk fascina con sus cientos de piezas de historia, arte y cultura paraguaya. La Biblio Playa, ubicada en la Costanera Playa San José, combina literatura y relax.
Para los entusiastas del deporte y las actividades al aire libre, Encarnación organiza competencias ciclísticas, talleres de bebidas frías a base de café y eventos como el “sunset y tragos”. También hay espacio para los espectáculos en vivo, con peñas, shows de DJs, bandas en vivo, fiestas temáticas como la del champagne y la previa de los carnavales encarnacenos en la Playa San José. AR
Ayolas: Paraíso natural abrazado por el Paraná
Ubicada a 306 kilómetros de Asunción y a 132 kilómetros de Encarnación, Ayolas se erige como un destino irresistible para quienes buscan conectar con la naturaleza y disfrutar de un entorno lleno de encanto. La brisa suave del Paraná, sus amplias áreas verdes en pleno corazón urbano, y la riqueza de su fauna y flora hacen de esta ciudad un lugar único.
La pesca deportiva y la gastronomía a base de pescado fresco son dos de los grandes atractivos que cautivan a visitantes nacionales e internacionales. El caudaloso río Paraná no solo define la identidad de Ayolas, sino que también alimenta su oferta turística.
La Playa San Josemí, completamente habilitada por el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades), es uno de los principales puntos de encuentro. Sus arenas invitan a relajarse, mientras que actividades como paseos en lancha y kayak o vueltas en gomones, disponibles por 30.000 guaraníes por persona, garantizan diversión para toda la familia. Además, cuenta con canchas de vóley y un parque infantil que asegura entretenimiento seguro para los más pequeños.
Por las noches, el encanto de Ayolas se amplifica gracias a un árbol luminoso de 22 metros de altura y 16 metros de diámetro, compuesto por 110.000 focos americanos. Este espectáculo, instalado frente al barrio San Antonio, junto a las letras corpóreas que identifican la ciudad, se ha convertido en un ícono nocturno que fascina a residentes y turistas.
A pocos metros, un lugar conocido como “Las Piedras” permite disfrutar de la brisa más pura del Paraná y desconectarse del ajetreo cotidiano bajo la sombra de imponentes árboles.
El Refugio Faunístico Atinguy, ubicado a 18 kilómetros de Ayolas en dirección a San Cosme y Damián, es otra joya turística. Este espacio natural de 100 hectáreas, habilitado en 1982 por la Entidad Binacional Yacyretá, alberga una gran variedad de animales silvestres que pueden ser admirados en su hábitat protegido.
Para los amantes de la historia, el Museo Histórico en la Villa Permanente de Yacyretá es una parada obligatoria. Este espacio ofrece una colección que conecta a los visitantes con la vida y el desarrollo de Ayolas, además de ser punto de partida para tours guiados hacia la Central Hidroeléctrica y las dunas vegetadas.
Recorrer las calles de Ayolas es una experiencia que combina naturaleza, cultura y espiritualidad. El templo San Josemí, que conserva un retablo jesuítico, junto con la Plaza del Pescador y el Club de Pesca, completa un circuito que deja una huella imborrable en quienes visitan la ciudad.
Con accesos asfaltados y una riqueza natural incomparable, Ayolas invita a explorar sus maravillas y disfrutar de un rincón del Paraguay que deslumbra por su autenticidad y belleza. VR