Poco después de las 10:00 de este domingo se dio inicio oficial a la convención del PLRA, con la presencia del 93% de los convencionales de un total de 592. El evento se realiza en el polideportivo municipal Juan Bautista Agüero de Caacupé.
Los liberales deben definir en la fecha si se establecen acuerdos políticos con otros sectores de la oposición para conformar una concertación y así enfrentar a la chapa del Asociación Nacional Republicana (ANR) en las presidenciales del 2023.
Otro de los puntos controvertidos a ser tratados será la aceptación o rechazo del balance partidario durante el primer periodo de mandato de Efraín Alegre, quien tiene serios cuestionamientos por parte de la disidencia por manejo de los recursos.
La convención también se realiza en medio de una disputa de larga data entre el oficialismo liderado por Efraín Alegre y el sector de Blas Llano; este último fue muy abucheado al hacer por primera vez uso de palabra.
Uno de los primeros puntos de disputa, al inicio de la asamblea, fue la conformación de la mesa para dirigir la convención del PLRA. Los llanistas solicitaron que todos los movimientos puedan tener participación para darles más legitimidad a las decisiones tomadas.
Cuando Efraín Alegre hizo uso de la palabra, a Blas Llano se le escuchó abuchear al parlamentario. Por otro lado, el legislador liberal fue repudiado a los gritos y con silbidos por su afinidad con el sector de Honor Colorado, liderado por el ex presidente Horacio Cartes.
“Espero realmente que los convencionales puedan decidir libre y voluntariamente, de acuerdo con sus convicciones e ideales, independientemente de las diferencias que tengamos en el seno del partido”, indicó Blas Llano.
Los convencionales en mayoría deberán votar por autorizar al Directorio del PLRA, representado por sus autoridades, a establecer acuerdos electorales por la vía de la concertación o por ir en forma unilateral.
En los papeles previos, y de acuerdo con las afirmaciones de todos los sectores del partido, esta votación sería prácticamente un trámite para que se habiliten la chapa presidencial y de las gobernaciones departamentales. No así para los cargos de diputados y senadores.