La fiscala Mirtha Ortiz confirmó en Monumental 1080 AM que el oficial Jorge Cañiza, actualmente investigado por un operativo irregular en Areguá, también estuvo presente el día en que el subcomisario Arístides Peralta recibió dos disparos que acabaron con su vida en octubre del 2018 en Fernando de la Mora.
Fue la viuda de Peralta, Lourdes López, quien dio aviso a los medios de la coincidencia del uniformado en ambos casos. La fiscala Ortiz confirmó la información, pero aclaró que el oficial no está imputado ni investigado, hasta el momento, por el anterior procedimiento.
Sobre el papel del agente en el operativo de hace cinco meses, la fiscala explicó que fue designado para realizar un trabajo de investigación por una denuncia sobre un posible asalto al banco que está dentro del supermercado Los Jardines, en Fernando de la Mora. Se dirigió hasta el lugar en su vehículo particular y estacionó en el establecimiento.
Nota relacionada: Apartan a policías que balearon transporte escolar e hirieron a niñas
De acuerdo con la versión de la representante del Ministerio Público, las cámaras de seguridad del comercio mostraron a Cañiza recorriendo el interior del local. “Hizo un trabajo de campo, en el momento en que se producen los disparos él estaba dentro y se lo ve salir apresuradamente”, agregó.
Volvió a su vehículo, salió del estacionamiento hacia el lugar donde se produjo la balacera, pero llegó ya luego de que Peralta recibiera el impacto de bala que acabó con su vida.
Otro punto que llamó la atención con respecto al sospechoso es que durante el procedimiento del lunes en Areguá, donde dos niñas resultaron heridas, estaba en el mismo Toyota Auris que utilizó en el anterior operativo.
Nota relacionada: Subcomisario fallece en tiroteo con asaltantes de banco
La fiscala señaló que en aquella ocasión el rodado no fue objeto de investigación porque no participó del trabajo en sí y tampoco recibió impactos de bala.
En este caso, el automóvil quedó incautado para las pericias correspondientes, al igual que la furgoneta que presenta siete impactos de bala, aunque en la zona se levantaron unas 50 vainillas servidas.
De acuerdo con los datos preliminares, en el procedimiento irregular de este lunes Cañiza conducía el vehículo, mientras su camarada Néstor Velázquez disparaba contra el transporte escolar.
Ambos están imputados por lesión grave y tentativa de homicidio doloso tras herir a dos niñas.