El Centro de Investigación y Propagación, que es el vivero de árboles, se denomina Santa Rosanna y se encuentra a 30 kilómetros al sur de la población de Carmelo Peralta, situado sobre el río Paraguay, entre Carmelo Peralta y Puerto Sastre, en el Departamento de Alto Paraguay.
Es una ambiciosa iniciativa que cuenta con la autorización del Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas (Senave) y el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible (Mades).
INICIATIVA. Cristian Nielsen, de Relaciones Públicas de Investancia, comentó que desde el 2014 trabajan en Alto Paraguay y Carmelo Peralta desarrollando la parte de investigación y desarrollo de pongamia.
Añadió que hace cinco años, como parte de la aprobación de Senave, comenzaron a realizar las primeras pruebas de reforestación con pongamia en sistemas silvopastoriles en distintos lugares del Chaco.
“La agroforestería en sistemas silvopastoriles combina árboles y ganado en la misma tierra, garantizando un bajo cambio indirecto de uso de suelo”.
En Santa Rosanna cuentan con 700 hectáreas con pongamia. “Estamos preparando un área de 2.000 hectáreas a 70 kilómetros al norte de Carmelo Peralta para la plantación de más árboles”.
REFORESTAR EL CHACO. Añadió que el proyecto de Investancia consiste en la reforestación de tierras marginales ganaderas del Chaco paraguayo.
“A partir de nuestro proceso de reforestación con el árbol producimos altos niveles de secuestro del CO2 de los árboles, también aceite de reforestación y bioproteínas de un árbol de leguminosas de hoja perenne de rápido crecimiento que cuenta con flores de lavanda convirtiéndose en vainas llenas de semillas con un altísimo contenido de aceite”.
Nielsen relató que las vainas se cosechan y las semillas se prensan para extraer aceite. “Tiene la capacidad de prosperar en zonas tropicales y climas subtropicales en todo el mundo”.
Además, dijo que “es resistente en tiempo extremo y a la sequía y se trata de un cultivo no alimentario con su aceite derivado de la actividad de reforestación tierras degradadas que fueron deforestadas más de 10 años antes”.
Nielsen explicó que los árboles de pongamia requieren poco en términos de riego y control de plagas, “lo que significa que se pueden cultivar en tierras marginales”. En este caso, en suelo chaqueño.
MANOS A LA OBRA. En la reforestación trabajan 40 a 50 empleados actualmente en 2.000 hectáreas. La producción total hoy en día es de un millón de árboles al año, y durante los próximos diez años irá aumentando hasta un total de 50 millones de árboles, dijo Nielsen.
“Es el primer proyecto en Paraguay y existe un acuerdo firmado con ECB Group que producirá 300.000 toneladas de aceite de pongamia a partir de 2030 en su refinería ubicado en Villeta, Departamento Central”.
BENEFICIOS. Uno de los principales objetivos del proyecto es reducir la deforestación, junto con la captura de las emisiones de dióxido de carbono mediante la reforestación, contaron desde Investancia.
Las actividades de conservación y reforestación reducirán la erosión y la escorrentía, lo que beneficiará a los ecosistemas acuáticos y ribereños adyacentes, señaló Nielse. Dijo que otros principales objetivos del proyecto es ayudar a restablecer los corredores críticos para la vida silvestre mediante la reforestación de pastizales y ranchos tropicales degradados.