Mencionó que siempre trabajó de cerca con la Hermandad, abriendo las puertas de la Iglesia para los eventos que se realizaban en honor a la beata y que propiciaba espacios de diálogo.
Además, indicó también estar muy entusiasmada con su equipo y siguieron de cerca la ceremonia de ayer y que incluso esperan que también se dé en poco tiempo un anuncio muy especial que marcaría la historia doblemente, ya qué hay rumores que Chiquitunga podría ser declarada Santa.
Aunque no existe ningún dato confirmado al respecto, toda la ciudad de Villarrica, de donde la beta es oriunda, aguardan también ese anuncio desde hace años.
Fiesta. Los villarriqueños disfrutaron con mucha emoción el evento de la investidura del monseñor Adalberto Martínez. La ciudadanía recordó que el noble cardenal fue obispo de la Diócesis de Villarrica del Espíritu Santo, donde se destacó por su humildad y servicio a favor de los más necesitados.
Durante la pandemia del Covid-19, el mismo encabezó una gran campaña solidaria para juntar alimentos perecederos y no perecederos, para posteriormente entregar a las familias más afectadas.
El Pbro. Blas Arévalos, administrador diocesano de la Diócesis de Villarrica del Espíritu Santo, dijo a Última Hora que en la reunión del Clero que realizaron el martes en el Distrito de Itapé, quedaron en que pondrán una intención por el monseñor Adalberto que desde ayer es oficialmente cardenal. “Estamos con regocijo, ya que es algo histórico en la historia del Paraguay. La elección del primer cardenal paraguayo es algo que marcará la historia de la iglesia paraguaya”, explicó.
En los próximos días, seguirán conectados al Vaticano desde la distancia. Esperan recibir la visita del nuevo cardenal.
La elección del primer cardenal paraguayo es algo que marcará la historia de la Iglesia paraguaya para siempre.
Blas Arévalos,
presbítero.