Un manejo corrupto, prebendario y oscuro en las instituciones del Estado fue revelado por audios filtrados de conversaciones del ex diputado del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) Carlos Portillo, que le valieron la pérdida de investidura ayer por primera vez en la historia de la Cámara Baja, que siempre se opuso a juzgar a sus miembros, pero esta vez el afectado hizo enojar a la bancada más fuerte por haberla salpicado y le sacaron el curul en un juicio fugaz.
José María Ibáñez había sido salvado en 2018, pero días después se vio obligado a renunciar como consecuencia de la presión ciudadana.
El diputado de Colorado Añetete Ramón Romero Roa presentó el pedido de pérdida de investidura e incluyó entre los argumentos el audio conocido en el 2017 por el que incluso fue abierta una causa penal. En la conversación Portillo pide USD 3.000 a una contadora para una resolución a su favor. Por el hecho se había pedido su destitución, pero fue salvado, porque no había condena judicial. Esta vez, tampoco; sin embargo, puso en evidencia cómo se reparten cargos en la Cámara Baja y afectó al presidente Pedro Alliana.
Romero Roa indicó que la primera vez la Cámara le dio su confianza, pero Portillo no aprendió y no rectificó su conducta, porque creyó que iba a seguir siendo protegido, en un “secreto a voces” fehacientemente comprobado.
“No es muy halagador solicitar la aplicación del artículo 201 de la Constitución Nacional referente a la conducta del colega Carlos Portillo, es una situación reiterativa del colega que nos envuelve en una situación bastante difícil desde el punto de vista institucional”, expresó.
Opositores como Sebastián Villarejo y los propios cartistas pidieron que Portillo dé nombres de los que negocian cupos.
En un juicio con un mecanismo que no estaba claro por la falta de reglamentación, Portillo negó todas las acusaciones y dijo que se trata de una persecución política en el marco de las elecciones municipales. Dijo que los audios son ilegales y pidió que fuesen peritados por la Fiscalía.
Solicitó 48 horas para su defensa, pero le fue negado el tiempo, alegando que había elementos evidentes de uso indebido de influencias.
Un hecho llamativo fue que Ulises Quintana, salvado antes de la expulsión, votó a favor de la pérdida de investidura. Se abstuvieron Hugo Ramírez, Hugo Capurro, Esteban Samaniego y Manuel Trinidad.
Se ausentaron los acusados por corrupción y protegidos Miguel Cuevas, Éver Noguera y Tomás Rivas. También Freddy D’Ecclesiis, Édgar Ortiz, Rodrigo Blanco, Salustiano Salinas, Nano Galaverna y Carlos Núñez Salinas.
Su suplente es el efrainista del Comité Liberal de Juan León Mallorquín, Carlos Noguera, aliado de la diputada Roya Torres.
61 diputados votaron por aprobar la pérdida de investidura de Carlos Portillo, quien dio el único voto en contra.
14 ausencias y cuatro abstenciones se dieron en la votación por la expulsión de Carlos Portillo en Diputados.
Pueden echarme mil veces, pero les aseguro que gracias a mi pueblo voy a volver a ser diputado. Carlos Portillo, diputado del PLRA.
LOS SALPICADOS POR PORTILLO
Pedro Alliana, diputado.
Portillo menciona en el audio que el presidente de Diputados reparte nombramientos entre cartistas y que un miembro de Honor Colorado le ofreció un cupo por dinero.
Fernando Silva, senador.
El senador llanista y presidente del JEM fue involucrado en negociaciones por cargos, ya que se menciona que fue contactado para intervenir en el Defensa Pública.
César Diesel, magistrado.
Carlos Portillo también menciona al presidente de la Corte, César Diesel, de quien dice ser su leal, y con quien hablará como parte de negociaciones en el Poder Judicial.
Lorena Segovia, defensora.
La ministra de la Defensa Pública, llanista, fue involucrada en los audios, en uno de los cuales Portillo sugiere a una mujer que hable con ella para obtener un cargo.