La postura de los diputados liberales Rodrigo Blanco y Eusebio Alvarenga, quienes forman parte del Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados (JEM) en representación de la Cámara Baja, además de la legisladora del mismo partido Esmérita Sánchez, resultará clave para juntar las 20 firmas que se necesitan de modo a presentar el pedido de pérdida de investidura del diputado José María Ibáñez, quien quedó impune tras reconocer que utilizó dinero público para pagar a sus caseros.
Los legisladores del PEN y el PPQ, impulsores del planteamiento de la pérdida de investidura del cuestionado diputado colorado, aguardan la respuesta y la decisión de los liberales entre hoy y mañana.
Los diputados azules solicitaron el fin de semana para pensar en la propuesta y tomar una postura, a más tardar para mañana.
El planteamiento, que ya lleva tres semanas de haberse propuesto, debe tener un finiquito, según expresaron los que iniciaron la propuesta.
Se necesitan 20 firmas para que pueda ser tratado por el pleno y 53 votos para sacar la investidura. Hasta el momento se juntaron 15 firmas, por lo que apelan a los liberales.
La semana pasada, la bancada efrainista en la Cámara de Diputados decidió liberar los votos para acompañar el pedido de pérdida de investidura de Ibáñez, quien logró ser beneficiado por la Justicia en el caso conocido como caseros de oro.
Los liberales que ya firmaron el pedido son Celeste Amarilla, Roberto Acevedo y Édgar Acosta.
Otro legislador que se podría sumar a este lote es el liberal representante del Departamento Central, Sergio Rojas.
El diputado Celso Maldonado es otro que no sentó una postura al respecto, y su decisión resultaría clave para llegar a juntar las 20 firmas.
A tres semanas de iniciarse el planteamiento de la pérdida de investidura del diputado colorado imputado desde hace casi cinco años por estafa, cobro indebido de honorarios y expedición de certificados sobre méritos y servicios de contenido falso, solamente 15 legisladores de los 80 integrantes de la Cámara se animaron a firmar el documento.
El liberal Pastor Vera Bejarano recomendó a Ibáñez que renuncie para poner fin a la cuestión.
Renuncia. De hecho, ante la presión ciudadana y mediática, Ibáñez comunicó el pasado miércoles a sus correligionarios y líderes de bancadas de los tres bloques liberales su intención de renunciar al cargo. Pero sus correligionarios, principalmente el imputado Tomás Rivas, se opusieron a dicha intención y le solicitó a su colega que “aguante un poco más”, ya que sostiene que la presión terminará en pocos días más.
Los colorados se abroquelaron y decidieron apoyar a su correligionario, pese a ser autor confeso del delito de tráfico de influencias.