Desde entonces, la vida familiar tomó otro rumbo al que se fueron adaptando y ahora todos sus integrantes conocen los detalles y los tiempos para cuidar a Martín y mantener equilibrado su nivel de azúcar.
Su madre recuerda que todo fue muy inesperado y que directamente uno relaciona con la diabetes tipo 2 y los estragos que causa en el paciente. Pero con mucha información y la dedicación a su pequeño supo manejar los tiempos y espacios para mantenerlo cómodo dentro de lo que implica estar con los niveles altos o bajos de glicemia.
En Paraguay, la incidencia de diabetes tipo 1 en menores de 0 a 25 años es de 1,8% por cada 100.000 habitantes y se adquiere por una predisposición genética y un factor desencadenante puede ser una cuadro gripal u otro de origen virósico. En el caso de Martín, fue una gripe.
“Era un chico muy alegre; no se quedaba quieto, y los últimos días no quería jugar; estaba nervioso comenzó con una gripe y comenzó la sed excesiva”, recuerda la madre. Cuando recurrieron al sanatorio le practicaron el estudio y Navarro tuvo que salir sabiendo aplicar insulina en el brazo, en la panza y la pierna de su hijo. “Lo hago cada vez que va a comer y de acuerdo a su nivel de azúcar. Puede comer todo, pero siempre cuidando, porque su alimentación es muy sana; puede comer dulces y todo lo que un niño quiere pero con los cuidados necesarios”, explica.
La doctora Gilda Benítez, directora del Programa Nacional de Diabetes, explicó que hoy se recuerda el Día Mundial de la Diabetes bajo el lema Protejamos nuestro futuro. El Ministerio de Salud Pública (MSP) organiza una jornada saludable en la explanada de la institución, donde se ofrecerá detección gratuita de la enfermedad, a partir de las 7 horas, además de actividades físicas y técnicas para la preparación de comidas sabrosas y nutritivas, anunció la licenciada Zunilda Rivas, coordinadora del Programa Nacional de Diabetes.