30 dic. 2024

Premio Asturias a padres del correo electrónico y el celular

El Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica fue concedida ayer a dos estadounidenses por su aportación al desarrollo del correo electrónico y la telefonía móvil.

matin cooper y raymond samuel tomilson

OVIEDO, ESPAÑA

Los ingenieros estadounidenses Raymond Samuel Tomlinson y Martin Cooper, “padres” del correo electrónico y el teléfono celular, dos de “las más grandes innovaciones tecnológicas de nuestro tiempo”, ganaron el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica.

Al leer su fallo, el jurado destacó que ambos inventos han revolucionado la manera de comunicarse de miles de millones de personas, han contribuido “de manera decisiva al avance del conocimiento” y son instrumentos claves para lograr los Objetivos de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas.

Este impacto se refleja en los más de 4.000 millones de usuarios de telefonía celular y en los 1.500 millones del correo electrónico y de otros servicios de internet que representan “una importante ayuda a los países en vías de desarrollo, para los que supone una fuente de igualdad y de oportunidades”, añadió.

LOS LAUREADOS. Cooper estudió ingeniería electrónica y en 1954 fue contratado por la empresa Motorola, donde se inició en el desarrollo de sistemas de radio portátiles para la Policía.

En esta empresa desarrolló el primer modelo DynaTAC 8000X (Dinamic Adaptive Total Area Coverage) con el que el 3 de abril de 1973 hizo la primera llamada desde el primer teléfono considerado “móvil” (celular) a Joel Engel, su rival de los Laboratorios Bell.

Por su parte, Tomlinson comenzó a trabajar en 1967 en Bolt Beranek and Newman (BBN), implicada en el desarrollo de la red ARPA para del Departamento de Defensa de EEUU, que pretendía interconectar ordenadores por teléfono para implementar la potencia de procesamiento de datos y descentralizar el almacenamiento de la información.

Sin el conocimiento de sus jefes, Tomlinson trabajó en secreto y en 1971 consiguió intercambiar mensajes entre varios ordenadores, para lo cual utilizó la arroba "@" como símbolo que separaría la parte del nombre del destinatario del correo electrónico del ordenador receptor (servidor) y que supuso el nacimiento del correo electrónico.

Él, en ese momento, sin embargo, no le dio la trascendencia que acabaría teniendo.

El primero de estos correos eléctricos de pruebas consistió en las letras que componen la línea superior del teclado “QWERTYUIOP”.

La candidatura de Tomlinson y Cooper fue propuesta por Vinton Cerf, considerado uno de los padres de Internet y Premio Príncipe de Asturias en 2002, y fue apoyada por varios premios Nobel.

Al galardón optaban 40 candidaturas procedentes de 21 países y a las últimas votaciones llegaron también el físico y secretario de Energía de EEUU, Steven Chu, Premio Nobel de Física en 1997, y los bioquímicos Erik de Clercq y Antonin Holý por sus investigaciones de nuevos tratamientos para el sida.

EL PREMIO

En los últimos años obtuvieron este premio, entre otros, los pioneros en el desarrollo de internet Lawrence Roberts, Robert Kahn, Vinton Cerf y Tim Berners-Lee, la etóloga Jane Goodall y los investigadores que lideran la investigación de las aplicaciones de nuevos materiales al desarrollo sostenible (Robert Langer, Tobin Marks, George M. Whitesides, Sumio Iijama y Shuji Nakamura). El galardón, dotado con 50.000 euros (unos 69.000 dólares) y la reproducción de una estatuilla diseñada por Joan Miró, es el quinto de los premios Príncipe de Asturias que se falla este año.

MARTIN COOPER, PIONERO DE LA MOVILIDAD

El ingeniero Martin Cooper es considerado el padre de la telefonía celular. Nacido en Chicago (EEUU), el 26 de diciembre de 1928, Cooper estudió ingeniería electrónica.

Durante 4 años sirvió en las Fuerzas Navales estadounidenses como oficial de submarinos y participó en la guerra de Corea, por lo que fue condecorado.

En 1954 fue contratado por la empresa Motorola, en la que comenzó el desarrollo de sistemas de radio portátiles para agentes de policía y en la que llegó a ser director Corporativo de Investigación y Desarrollo.

En Motorola, empresa en la que permaneció hasta 1983, desarrolló el primer modelo DynaTAC 8000X (Dinamic Adaptive Total Area Coverage) con el que el 3 de abril de 1973 realizó la primera llamada desde el primer teléfono considerado “móvil” (celular). Contactó, en esa ocasión, con Joel Engel, su rival de los Laboratorios Bell.

Posteriormente fundó, junto a su mujer, una empresa dedicada ya a la telefonía celular y en abril de 1992 Martin Cooper fue uno de los fundadores de la empresa ArrayCoom, dedicada a la tecnología de antenas y telefonía móvil, de la que es consejero delegado.

Por esa trayectoria, ayer fue galardonado con el Asturias.

RAYMON TOMLINSON, EL DUEÑO DE LA @

Raymond Samuel Tomlinson es ingeniero y padre del correo electrónico que ideó la utilización de la arroba "@".

Tomlinson, que nació en Amsterdam (Nueva York, EEUU), en 1941, estudió en el Instituto Politécnico Rensselaer, donde participó en un programa de la compañía IBM. En 1963, se graduó en Ingeniería Eléctrica para continuar su formación en el Instituto Tecnológico de Massachussets. En 1967 comenzó a trabajar en Bolt Beranek and Newman (ahora BBN), implicada en el desarrollo de la red ARPA para el Departamento de Defensa, que consistía en interconectar varios ordenadores mediante líneas telefónicas para el procesamiento de datos y almacenamiento de información.

Sus campos de investigación fueron el desarrollo del programa Sndmsg, acrónimo de send message (enviar mensaje), para el sistema operativo TENEX, el utilizado por Arpanet, así como el programa de transferencia de ficheros Cpynet.

Trabajó en secreto y en octubre de 1971 consiguió intercambiar mensajes entre varios ordenadores, para lo cual utilizó la arroba "@" como símbolo que separaría la parte del nombre del destinatario del correo electrónico del ordenador receptor (servidor) y que supuso el nacimiento del correo electrónico.

Eduardo Punset, quien divulgó los premios, consideró que los laureados han dado un ejemplo de lo que puede lograr la unión entre la ciencia y la industria.