“Esta modificación del Código lleva a la posibilidad de que el TSJE, con base en informes del Poder Ejecutivo, terminadas las elecciones, anule la candidatura del electo. Le estamos dando una potestad extraordinaria que se coloca por encima de la voluntad soberana de la gente”, dijo Villamayor.
El proyecto de trazabilidad del financiamiento político establece que tras las elecciones, y si se detecta un posible lavado de dinero, “en horas” el TSJE debe resolver dejar fuera a un candidato. “Planteo una preocupación y estoy seguro de que desde el plenario se va a tener en cuenta y alguien va a tratar el tema”, dijo. Acotó que el Ejecutivo está de acuerdo en combatir el esquema de lavado de dinero, pero “no podemos llevar las elecciones a un grado de inseguridad”. “En este proyecto estas dos cosas están mezcladas y deben tratarse por separado. Tiene que ser una ley que reprima el lavado en procesos electorales, pero no una ley que modifica el sistema electoral”, apuntó.
Sostuvo que la SET y Seprelad dependen del Ejecutivo y trabajarán para determinar la existencia de lavado. “Con base en este dictamen, el TSJE debe resolver en horas. Son pocos los días que separan el final de las internas de la inscripción de candidatos”, resaltó.
Para Villamayor, la decisión que afectará el sistema electoral se basará en el informe que recibe del Ejecutivo. “¿Queremos que el TSJE juzgue el delito del lavado? ¿Queremos que el TSJE cambie los resultados con la decisión que tome con base en un informe del Ejecutivo? ¿Vamos a controlar solo las internas?”, se interrogó. Dijo que hay que tener cuidado con el sistema electoral porque “tomar la decisión de legitimar un candidato después de terminadas las elecciones será una “herramienta fantástica para que nadie acepte ningún resultado”.
Estamos de acuerdo en combatir el lavado, pero no podemos llevar las elecciones a un grado de inseguridad.
Estamos dando una potestad extraordinaria (al TSJE) que se coloca por encima de la voluntad soberana. Juan Ernesto Villamayor, jefe de Gabinete.