También en este Municipio se padece actualmente la acción de la aplanadora que completa los votos necesarios con los del Partido Liberal. En este caso, una mayoría de 14 votos, 11 concejales colorados y tres liberales aprobaron un nuevo endeudamiento para cubrir déficit temporal de caja de la Municipalidad de Asunción. A estos representantes de los vecinos de Asunción no les ha afectado el actual escándalo suscitado tras el rotundo informe de la Contraloría.
La Contraloría General de la República había emitido un dictamen, después de haber revisado documentos de la Municipalidad de Asunción sobre el manejo de fondos de emisiones de bonos, específicamente del G8 y G9. Tras el análisis de los documentos saltaron las irregularidades en el manejo del dinero que debía ser destinado a obras, pero que fueron destinados a gastos corrientes, sin tener documentaciones que respaldaran la decisión. Según los funcionarios de la Contraloría, tampoco recibieron las informaciones que requirieron al Municipio. Un tiempo después la Fiscalía realizó un allanamiento en la Municipalidad, en busca de los documentos en cuestión.
El intendente Óscar Nenecho Rodríguez había pedido un préstamo por G. 299.000 millones, y en la Junta aprobaron G. 279.000 millones. Desde que Nenecho Rodríguez es intendente, los préstamos para cubrir gastos corrientes, principalmente salarios, ya suman G. 1 billón 239.000 millones (USD 165 millones).
Como había explicado el ex concejal Federico Franco Troche, la Municipalidad de Asunción hace tiempo no tiene recursos suficientes para cubrir sus gastos corrientes; y mientras que en la administración de Mario Ferreiro se necesitaban G. 60.000 millones para cubrir salarios y aguinaldos para fin de año, ahora se está pidiendo casi G. 300.000 millones, esto es, cuatro veces más.
Entre los cuestionamientos a la gestión del intendente, el concejal Álvaro Grau puntualiza el peligro que supone que, para obtener el préstamo se ponga como garantía los inmuebles de la Municipalidad de Asunción. “Los bancos van a venir a rematar las tierras de la Costanera; esa es la trampa”, advierte.
La situación financiera de la Comuna y el camino que están eligiendo para apagar el incendio no hace más que prolongar una agonía que solamente la están viviendo los vecinos de Asunción. Son los ciudadanos quienes conocen la experiencia de vivir en una ciudad que parece haber sido bombardeada, y que se muestra en total estado de abandono por sus autoridades. El centro agoniza, perdiendo rápidamente los últimos vestigios de su historia, las viejas casonas terminan como aguantaderos de maleantes, adictos y como criaderos de insectos. Lo mismo sucede en la zona de la Terminal de Ómnibus de Asunción y sus alrededores, lo que la convierte en la zona sumamente deteriorada e insegura, esto sin mencionar la pésima imagen que ofrece a los viajes que llegan a la Terminal.
Nuestra querida capital es hoy en día una víctima más de una administración municipal que tiene al frente a personas sin preparación ni compromiso con la ciudad y su gente. Por eso, no pueden resolver los problemas que demanda la ciudadanía de contar con buenos servicios y mejor calidad de vida. Asunción es la lamentable prueba de que la corrupción y la impunidad empobrecen la calidad de vida de la población. Por esto, es urgente que se resuelvan todas las dudas respecto a la situación financiera de la Municipalidad.
