El mandatario Yoon Suk Yeol retrocedió después de que el Legislativo, donde la oposición tiene mayoría, votara en contra del sorpresivo decreto que el Ejecutivo aprobó horas antes y que generó preocupación en la comunidad internacional, especialmente en Estados Unidos, un importante aliado de Seúl.
“Hace un momento, la Asamblea Nacional pidió que se levante el estado de emergencia, y hemos retirado a los militares desplegados para las operaciones de la ley marcial”, declaró Yoon en un discurso televisado a las 04H30 hora local (19H30 GMT del martes).
“Aceptaremos la petición de la Asamblea Nacional y levantaremos la ley marcial en una reunión del gabinete”, afirmó.
LUCHA POR EL PRESUPUESTO. El mandatario conservador del Partido del Poder del Pueblo anunció la implantación de la ley marcial en el marco de una pugna con la oposición por el presupuesto, tras más de dos años de un gobierno marcado por sus bajas cotas de popularidad.
La decisión fue impugnada poco después mediante un voto en la Asamblea Nacional y el jefe de la oposición, Lee Jae-myung, instó a la población a manifestarse frente al Parlamento, que fue precintado. Los manifestantes apostados fuera del Parlamento celebraron la decisión de Yoon de revertir el decreto.
Yoon decretó la ley marcial en un dramático discurso el martes en la noche afirmando que buscaba “salvaguardar” al país “de las amenazas que plantean las fuerzas comunistas de Corea del Norte”.