El senador colorado Óscar González Daher no resistió la presión ciudadana y a primeras horas de ayer presentó su renuncia indeclinable al cargo y, sin fueros que lo proteja, está enteramente sometido a la Justicia para la investigación por presunto lavado de dinero, usura y otros.
Huérfano de apoyo político, incluso de la propia bancada cartista que la noche del martes le soltó la mano, el otrora poderoso luqueño no tuvo otra que dimitir a su banca, apenas dos meses después de iniciado el proceso parlamentario para el que fue reelecto.
La nota de renuncia fue enviada al presidente del Congreso, senador Silvio Ovelar, y está previsto, a pedido de la bancada cartista, que el documento se ponga hoy a consideración del pleno y sea aceptado. De no darse tratamiento a la dimisión ya obra también en el Senado el pedido de una sesión extraordinaria que ayer presentó la multibancada opositora para que se trate igual la pérdida de investidura de González Daher, quien ya fue echado por el mismo procedimiento en el periodo pasado, cuando salieron a luz unos audios que revelaron cómo el luqueño operaba traficando influencias sobre sendos procesos judiciales.
El anuncio de la renuncia del cartista lo hizo a tempranas horas de ayer vía Twitter el también integrante de la bancada de Honor Colorado, Javier Zacarías Irún, y horas después el senador de HC, Juan Darío Monges, líder de ese bloque, lo confirmó presentando la nota de dimisión.
“Con esto Óscar González Daher se aparta de los fueros y deja de ser senador. Se pone a disposición de la Justicia. Es un signo de grandeza”, refirió Monges en conferencia de prensa, mientras que González Daher ya no apareció por el Senado.
Monges añadió que hay que considerar que su colega, integrante de la bancada cartista, dio este paso sin presión de la bancada y lo hizo por propia voluntad.
“Nadie te puede obligar a renunciar. Él ha tomado su decisión libremente. Nos ha comunicado a nosotros”, dijo Monges. Sin embargo, Zacarías Irún afirmó más temprano vía redes sociales que la bancada HC le pidió su dimisión.
Dentro de la propia bancada cartista, el senador Sergio Godoy informó que González Daher reunió al equipo la noche del martes y consultó qué pensaban sus colegas sobre su situación. Godoy reconoció que allí él en persona le dijo a González Daher que acompañaba su pérdida de investidura.
Monges terminó diciendo que espera que sus colegas acepten la renuncia “por sensibilidad”.
Presión ciudadana. Un factor clave para que el senador deje finalmente el cargo fue la presión y el escrache ciudadano que fue creciendo día a día y, que frente a la residencia del ahora renunciante legislador de Luque, se realizó ininterrumpidamente durante 22 días.
A esto se sumó que en el Senado también, tras varios días de dudas y vacilaciones de la mayoría, casi por unanimidad –incluido los cartistas– dieron su apoyo a una nueva pérdida de investidura del político colorado, planteamiento que se presentó oficialmente ayer para su tratamiento.
La renuncia tendrá entrada en la sesión de hoy y es la plenaria la que tiene la potestad de aceptarla o rechazarla para analizar la pérdida de investidura. Para ello requieren de 30 votos, números que se alcanzan holgadamente.
