Las esperanzas de contar con una cotización estable del dólar aún se encuentra lejos de convertirse en realidad. A pesar de que Estados Unidos (EEUU) lanzó señales tranquilizadoras a través de sus últimas decisiones de política monetaria, el tumultuoso escenario internacional aporta altas dosis de volatilidad al tipo de cambio.
La Reserva Federal (FED, por sus siglas en inglés) de EEUU decidió mantener sin modificaciones su tasa de referencia, en el rango de 2,25% a 2,5%. Esta medida aporta tranquilidad a los países emergentes, como Paraguay, debido a que se genera un menor incentivo para la fuga de capitales hacia el mercado estadounidense y en consecuencia, se reducen las presiones al alza en la cotización del dólar, sostiene la consultora local MCS.
La firma destaca que la mencionada medida de la FED presionó a la baja a la cotización de la moneda estadounidense frente a las principales del mundo, según el índice del dólar. Por otro lado, descarta que se apliquen subas de tasas en el corto plazo por parte de la potencia norteamericana, debido a que esta economía está creciendo a un ritmo lento, aunque de manera importante en el primer trimestre del corriente año.
El economista César Paredes considera, por su parte, que la volatilidad del tipo de cambio se mantendrá al menos durante el resto del año, debido a que los efectos de la guerra comercial entre China y EEUU son todavía impredecibles y persiste el pesimismo respecto al ritmo de crecimiento económico global. En este escenario, espera que el tipo de cambio siga mostrando picos ante los cuales el Banco Central del Paraguay (BCP) deberá mantener una intervención constante.
“En un mundo tan volátil es imposible que tengamos una moneda hiper estable, como estábamos acostumbrados”, recalca.
Reconoce que el mercado cambiario local logró calmarse en las últimas semanas, luego de que el BCP efectuara una fuerte inyección de divisas, que inicialmente fue de USD 15 millones diarios, como mínimo, y luego se redujo a USD 5 millones. “Hacía falta para calmar la especulación”, dice. Cuando las tasas de interés suben en EEUU, las inversiones se trasladan hacia este mercado en busca de mayores rendimientos por los fondos allí depositados, lo que deriva en apreciación del dólar.
