Uno de los casos llamativos es la prisión domiciliaria al ex-intendente de Jesús de Tavarangue, Hernán Adolar Schlender Benítez, procesado por los delitos mencionados. El ex jefe comunal guardaba reclusión en el Penal de Itapúa y el sábado pasado retornó a su domicilio, por decisión de la jueza Gilian Espínola.
Schlender fue acusado por la fiscala Victoria Acuña. La acusación alcanza también a las hermanas del procesado ex jefe comunal –Dolly Nilsen Schlender y Mariza Mabel Schlender–. La fiscala solicitó se eleve la causa a juicio oral y público.
Se investiga un esquema de lavado de dinero presuntamente proveniente del narcotráfico a través de las cuentas bancarias de la Municipalidad de Jesús.
Por otro lado, Ismael Paredes Flor, quien valiéndose de la pandemia del Covid-19 y luego de varias acciones logró el arresto domiciliario que venía pidiendo desde hace tiempo, alegando enfermedad terminal. En este caso, la medida fue firmada por el juez Enrique González, luego del informe de una nueva junta médica.
Paredes Flor, alias Patrón, fue detenido el 7 de mayo del 2016 junto a sus hijos Ignacio Ramón Paredes Sanabria e Hilda Noemí Paredes Sanabria, en el marco del operativo denominado Tormenta del Sur.
Paredes Flor fue condenado por los jueces Diana Arana, Fabián Iglesias y Nelio Prieto a 7 años de cárcel por tráfico de drogas, en tanto que sus hijos Ignacio Paredes e Hilda Paredes fueron absueltos. Pero a raíz de la exigua pena, el juicio fue anulado en el 2018 iniciándose un nuevo proceso y como derivación de dicha causa hoy en día está en curso la investigación por lavado de dinero.