El titular de la Procuraduría General de la República, Roberto Moreno, reconoció que el Estado “perdió" el dinero que desembolsó para pagar la deuda de la Azucarera Iturbe SA, del Departamento del Guairá, pero que están peleando en la Justicia su recuperación, aunque no se resuelvan las acciones impulsadas, como la solicitud de quiebra, debido a medidas obtenida por los directivos de la firma.
En enero del año pasado, el Gobierno destinó 15.000 millones de guaraníes para el pago de la deuda de la azucarera a obreros, cañeros y transportistas.
El presidente Horacio Cartes logró la sanción de una “ley especial”, bajo el argumento de “razón social” para hacer este desembolso, que fue duramente criticado por gremios industriales y empresariales, quienes advirtieron que se estaba dejando un precedente nefasto con la intervención del Estado para pagar la deuda de una empresa privada y debía seguir su curso natural de quiebra para que los trabajadores cobren.
A su vez, señalaron que existía un alto riesgo para recuperar este dinero, debido a la situación de quiebra de la azucarera.
JUICIO. Consultado qué pasó con las acciones para recuperar el dinero, Moreno dijo que el pedido de quiebra de la Azucarera Iturbe está en el juzgado, pero “con incidencias de directivos de la empresa que, como siempre, están pateando la pelota para adelante como se dice y eso todavía no se resolvió, está judicializado”.
Consultado si el Estado está perdiendo esos quince mil millones de guaraníes hasta ahora, respondió: “Bueno. A ver, no está recuperando. El Estado ya perdió los quince mil millones al pagar digamos, pero la idea es tratar de recuperar”.
Según los antecedentes y una serie de demandas que arrastran los directivos de la azucarera, la recuperación del dinero es considerada en el ámbito judicial “una misión imposible”, como de hecho lo señalan otros acreedores.
NADA. Por su parte, Francisco Acosta, dirigente cañero de la ciudad de Iturbe, Departamento de Guairá, donde se encuentra la planta de producción de la azucarera, dijo que no saben nada de lo que está pasando con la firma azucarera.
Señaló que hace tres años que la planta está parada y hoy tiene un guardia del Banco Visión que vigila lo que entra y sale del predio y no se definen las demandas que tiene la empresa en la Justicia.
“Ahora los dueños tienen una plantación de eucalipto que están convirtiendo en raja y vendiendo. Están vendiendo todo lo que puedan”, refirió.
Acosta dijo que si bien recibieron el pago de la deuda, la situación de los cañeros de la zona sigue siendo lamentable y no hay esperanzas de sobrevivir con este rubro, debido a que con la caña dulce apenas les queda 20.000 guaraníes de utilidad por tonelada.