En la víspera, la Secretaría Nacional de Turismo (Senatur) anunció que este innovador proyecto gastronómico fue seleccionado como finalista de los prestigiosos Premios Excelencias Turísticas 2025, que se entregarán el miércoles 22 de enero, en el marco de la Feria Internacional de Turismo (Fitur), de Madrid (España).
Nacido en 2016 como un pequeño proyecto familiar, Tucos Factory evolucionó hasta convertirse en una microempresa que produce una amplia gama de productos a base de algarrobo, mistol, molle negro, kinoto, meloncito y tuna, entre otros frutos silvestres, encontrados en el Chaco paraguayo. Cada producto es el resultado de una minuciosa investigación y un profundo respeto por las tradiciones culinarias de las comunidades indígenas.
“Empezamos como un juego, haciendo muestras. Nunca imaginamos que esto se convertiría en un emprendimiento tan grande”, confiesa Adelina Friesen, desde Filadelfia, en el Chaco Paraguayo.
“Hoy, gracias al apoyo de diversas instituciones y al trabajo incansable de nuestro equipo, podemos decir que estamos contribuyendo a preservar el patrimonio cultural y natural del Chaco”, resalta la emprendedora.
Empoderamiento. Uno de los pilares fundamentales de Tucos Factory es el empoderamiento de las mujeres indígenas. Más de 80 mujeres de las etnias Nivaclé y Guaraní Ñandeva participan activamente en todo el proceso productivo, desde la recolección de los frutos hasta la elaboración de los productos finales. “Queremos que las mujeres indígenas sean las protagonistas de su propio desarrollo”, afirma Adelina. “Al trabajar con nosotras, aprenden nuevas habilidades, generan ingresos y se sienten valoradas como parte de una comunidad productiva”, dijo.
Sostenibilidad. La sostenibilidad es otro de los valores fundamentales de Tucos Factory. La empresa trabaja en estrecha colaboración con la Universidad Nacional de Asunción para investigar las propiedades nutricionales y los beneficios de los productos silvestres, asegurando así la calidad y la seguridad alimentaria.
Además, la empresa está comprometida con la preservación del medio ambiente a través de prácticas sostenibles de producción y consumo. “Los productos silvestres del Chaco son un tesoro que debemos cuidar”, afirma Adelina. “Al consumir nuestros productos, los consumidores están contribuyendo a la conservación de los bosques y a la preservación de las culturas indígenas”, agrega.
Planes a futuro. La empresa tiene grandes planes para el futuro, pues busca expandir su presencia en el mercado nacional e internacional, fortaleciendo su marca y posicionándose como un referente en el mundo de la alimentación saludable y sostenible. “Queremos que nuestros productos sean reconocidos a nivel mundial por su calidad y su origen”, afirma Adelina. “Además, queremos seguir trabajando para mejorar la calidad de vida de las comunidades indígenas del Chaco”, remarcó.
Premio. El reconocimiento a la labor de Tucos Factory trasciende fronteras, al ser elegida como finalista de los Premios Excelencias Gourmet 2024, un prestigioso galardón que reconoce la excelencia en el sector turístico gastronómico.
Este reconocimiento es un impulso para seguir trabajando y consolidar el proyecto, asegura su propietaria. “Estamos muy orgullosos de este reconocimiento, que aun no podemos creer”, resalta la emprendedora. “Es una muestra de que estamos en el camino correcto y que nuestro trabajo está siendo valorado”, asegura.
Agrega que esta nominación refleja el esfuerzo colectivo de quienes trabajan día a día por el turismo paraguayo, mostrando al mundo el inmenso valor de nuestra cultura y creatividad.
Desde la Senatur destacan que seguirán “impulsando proyectos que posicionen al Paraguay como un destino único y sostenible”, expresó la ministra de Turismo, Angie Duarte, con respecto a la nominación de este proyecto gastronómico. La entrega de premios se hará en el marco de la Feria Internacional de Turismo de Madrid el 22 de enero. “Vamos a trabajar mucho más en marketing y potenciar la entrada de nuestros productos a los supermercados y su distribución a gran parte del país, que todavía es nuestro gran desafío y luego ver la posibilidad de poder exportar”, concluye Adelina Friesen.