Yo estoy de acuerdo con que los linces vayan a cara descubierta, nuestro estado de derecho es muy frágil para arriesgarnos a que un cuerpo de policía tenga la opción de cometer excesos con la impunidad de un pasamontañas.
Y creo que el senador Óscar González Daher no solo debe perder su investidura, sino debe ser procesado y pagar por los delitos que haya cometido.
Estoy convencida de que todos los parlamentarios que tienen cuentas pendientes con la Justicia, deberían perder sus investiduras. Supongo que usted, amable lectora, sabe que este periodo parlamentario comenzó con 11 imputados en la Cámara de Diputados, Senado y Parlasur, y que ninguno de ellos fue jamás condenado.
Ya que estamos, manifiesto que deseo la paz mundial, que haya justicia social en el mundo, se acabe todo tipo de discriminación, y que todos los curas pedófilos vayan a la cárcel.
Habiendo hecho toda esta aclaración y bajada de línea de principios, paso a expresar mi preocupación y mi más ferviente protesta en contra de las autoridades que manejan el fútbol paraguayo, porque hasta ahora nuestra selección no tiene director técnico.
Pueden pensar que es un tema menor, pero no es así. Paraguay estuvo ausente en los últimos dos Mundiales, después de haber vivido una racha buena y exitosa. Ahora lo que estamos experimentando es una situación de lo más vergonzosa. Pocas veces hemos visto a una dirigencia tan mediocre, tan ninguneada por el resto del mundo, y que además no tiene vergüenza por exponer al país a una situación tan desagradable.
Hubo un tiempo en el que otras selecciones le tenían respeto a la Albirroja. Hoy, no hay técnico que quiera venir a dirigir nuestra selección. Y eso, señoras, es muy triste. Cada día en las redes sociales se habla de que Almeyda dijo no, que Scolari dijo no, que Sampaoli dijo no, Osorio y otros héroes también dijeron que no.
A Paraguay ya nadie lo quiere ni lo respeta y los inútiles que mal manejan el fútbol siguen ahí como si nada. Creo que es hora de que alguien haga algo al respecto.
Bien sé que no es competencia del Poder Ejecutivo, ni de los otros dos, ocuparse del fútbol en el país. Imagínense, si el propio trabajo que les compete apenas cumplen...
Y, aunque sé que el nuevo presidente de la República tiene mucho trabajo, y prioridades más urgentes, como lograr que todos los paraguayos tengan salud, educación, seguridad, tierra y trabajo, no obstante, mal no nos va a hacer si nos dan un poco de circo, de vez en cuando. Así que, si lee esto, le decimos que: Necesitamos con ur-gen-cia un técnico para la Albirroja.
Así como también necesitamos otras cosas que probablemente no sean de primera necesidad, pero que sin lugar a dudas están relacionadas con que nuestra vida no sea solo ese monótono discurrir entre la casa alquilada, el viaje interminable en el ómnibus que avanza a paso de tortuga porque nos robaron el Metrobús, llegar al trabajo, y salir de vuelta a la calle diez horas después para volver a sufrir el infernal tráfico, el ómnibus, el alfajor a dos mil y llegar a la casa alquilada para dormir un rato, y volver a comenzar la rutina. Todo esto sin mencionar que por el camino te puede asaltar el motochorro, y que si trabajás diez horas, sos un privilegiado que tiene un laburo.
Sé que Mario Abdo no es Papá Noel, pero si está escuchando, sería lindo que nos diera un internet más rápido y barato, y ya que estamos, que desmonopolice la transmisión del fútbol local. Amén.