La fiscala Esmilda Álvarez manifestó en NoticiasPy que “es imposible” que uno no se diera cuenta de lo que sucedió en la vivienda ubicada sobre Oliva y Montevideo, donde ocurrió el crimen macabro. “La escena habla por sí sola”, agregó.
Alba Rosalía Armoa, María Araceli Sosa Díaz y Marcelo Sosa Díaz estuvieron en el lugar días después del crimen, antes de que los cadáveres de Dalma Rojas; su padre, Julio Rojas del Valle; su madre, Elba Rodas; y los hijos de Dalma, de 4 y 6 años, sean hallados. La representante del Ministerio Público indicó que “no es una escena donde uno entra y tranquilamente puede decir que ahí no pasó nada”.
“Había sangre, había un olor muy fuerte, estaba todo muy desordenado, había documentos, carteras abiertas. No sé cómo puede estar una persona ahí sin que se le prenda la alerta”, expresó. Para Álvarez, esos son elementos que utilizaron para imputar a Armoa y los hermanos Sosa Díaz por homicidio doloso en carácter de cómplices.
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Los cuerpos estaban enterrados en el fondo de la casa e, incluso, uno de los fallecidos seguía estando en una de las habitaciones, en estado de descomposición, mientras ellos estaban en la casa, donde incluso participaron de una fiesta de Karaoke, dos días antes de que se conociera el quíntuple homicidio.
En una carta publicada anteriormente, María Araceli alegó que la casa estaba llena de orín de perro y la cachorra estaba mucho tiempo sin bañarse. Además, Bruno Marabel, principal sospechoso, ponía a cada rato desodorante de ambiente, lo que dificultó que las tres personas pudieran advertir que ocurría algo extraño en la vivienda.
Con respecto a las declaraciones de ambas imputadas, recluidas en la Comisaría 17ª de Mujeres, ante medios de prensa, la fiscala señaló que hasta el momento no comparecieron ante el Ministerio Público, por lo que evitó dar una opinión.
Alba no quiso entrar en detalles sobre lo ocurrido el día en que estuvieron en la vivienda, mientras que María Araceli aseveró que solamente pudo ver manchas de sangre en la mascota que tenía Marabel.
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La fiscala Álvarez indicó que consiguieron imágenes de un solo circuito cerrado de la zona, que tienen que revisar.
El temple de Marabel
En otro momento dado, fue consultada sobre cómo percibió a Marabel, imputado por feminicidio y homicidio doloso. Álvarez señaló que en todo momento se lo veía calmado, “sin ningún tipo de sensibilidad o arrepentimiento”, pero, cuando recordó a los padres de Dalma, tuvo un momento de rabia.
La representante del Ministerio Público dijo que hay denuncias por violencia intrafamiliar, estafa y producción de documentos no auténticos, pero no ahondó en las mismas, ya que siguen recabando datos.