El joven hijo de la diputada de Alto Paraná, Roya Torres, tal como publicó Última Hora la semana pasada, fue nombrado con G. 9.500.000. Se presume que el contrato fue fruto del canje por lealtad a la actual conducción del gobierno.
El joven se llama Elías Godoy Torres y es hijo del matrimonio integrado por la parlamentaria y el intendente de Presidente Franco, Roque Godoy.
Ayer, se buscó hablar con el joven que tuvo la suerte que su primer trabajo ya sea jugosamente remunerado, presumiblemente por influencia de su madre, pero la oficina de la diputada estaba cerrada.
Del mismo modo, otro liberal dionisista, Cleto Giménez, quien coincidentemente con el caso de su colega también logró este periodo que la Cámara contrate a sus hijas.
Sendos contratos se produjeron en setiembre. Uno benefició a Maricela Giménez Rotela, que percibe un salario de G. 7.700.000 y otro para Johana Giménez Rotela, con un ingreso de G.3.300.000.
Cabe resaltar que tampoco la oficina del diputado de Canindeyú estaba abierta al público, por lo que se presume que allí nadie fue a trabajar.
Los casos de Torres y Giménez se unen al del diputado Alejo Ríos y sus colegas Játar Fernández, Mino Adorno, Germán Solinger, Benjamín Cantero, todos, con parientes directos en la Cámara. Cabe añadir que la Cámara también albergó a hijos del Senador, Silvio Beto Ovelar y del vicepresidente de la República, Pedro Alliana. Varios legisladores además mediante claro tráfico de influencias, lograron que leales y operadores políticos tengan un ascenso meteórico.
Es el caso del propio titular de Diputados, Raúl Latorre, cuyo secretario Germán Jovellanos gana G. 26 millones. También el diputado Carlos Núñez Salinas tiene a su teólogo Carlos Argüello de asesor