La carpeta de imputación señala que el 1 de mayo de 2024, Fernando González Karjallo –quien se encuentra recluido cumpliendo una pena de cinco años de prisión por lavado de dinero–, habría firmado un contrato de alquiler con la señora Katherine Lorena Rodríguez, de un inmueble ubicado en la calle Celsa Spperatti esquina Rogelio Santacruz, de la ciudad de Asunción, con cuenta corriente catastral N° 12-0875-07, del distrito de San Roque.
Sin embargo, dicho inmueble fue objeto de comiso el 22 de mayo de 2023, en el marco del proceso por usura y lavado de dinero, en el cual fueron condenados González Karjallo y su padre RGD, con la medida de prohibición de innovar y contratar sobre varios inmuebles inscriptos a nombre de ambos.
El fiscal Cantero sostiene que el imputado asumió funciones públicas que no le corresponden y se apropió indebidamente de los ingresos del alquiler, los cuales debieron ser depositados en el Tesoro Público, ya que están bajo la administración de la Senabico.
La denuncia había sido presentada por el abogado Gonzalo García de Zúñiga, director general de la Asesoría Jurídica de la Secretaría Nacional de Administración de Bienes Incautados y Comisados (Senabico), contra el clan González Daher, debido al arrendamiento de una propiedad en Asunción, a pesar de que esta ya pasó a manos de la Senabico, en el marco de una condena por lavado de dinero y otros delitos.
Se trata de una vivienda ubicada en una zona residencial del barrio Mburicaó de Asunción, donde se estableció una funeraria que operó de manera clandestina hasta que fue clausurada por la Municipalidad de la capital.
En total, 141 inmuebles fueron comisados tanto de Ramón González Daher como de su hijo Fernando González Karjallo, de los cuales 53 han sido entregados a la Senabico. De ellos, 25 son de González Daher y 28 de su hijo, conforme señaló la magistrada de Ejecución. De esta manera, quedan aún 88 inmuebles que deben ser traspasados a nombre del Estado.