La oposición paraguaya en los tiempos de la dictadura stronista recuerda con hondo pesar al extinto ex presidente de Argentina, Raúl Alfonsín, como un mandatario que trajo muchas esperanzas no solo al pueblo argentino sino también al Paraguay, que en ese tiempo se encontraba sumido por las persecuciones políticas y el atropello a los derechos humanos.
Hermes Rafael Saguier, amigo de Alfonsín, recordó que el político argentino tomó contacto con la oposición paraguaya mucho antes de que sea presidente, donde compartían algunas reuniones, opiniones comunes con grupos de residentes paraguayos. “Tal es así que un grupo de paraguayos, entre ellos me encontraba yo, trabajamos intensamente con su campaña proselitista”, recordó.
En aquella época, los compatriotas que vivían en Argentina tuvieron una colaboración importante, especialmente en los barrios pobres que, en las palabras de Saguier, estaban prácticamente tomadas por los peronistas. Una vez ganada las elecciones, Alfonsín tuvo un trato “afectuoso” con la oposición paraguaya, desde un principio los trataba con mucha consideración, inclusive los invitó para la asunción al mando y posteriormente estuvo en distintas reuniones con organizaciones.
SOLIDARIO. Otro político liberal enfrentado a la dictadura era Domingo Laíno. A su parecer, Alfonsín fue un maestro de la democracia. “Fue uno de los más solidarios presidentes para con los compatriotas”, refirió. Laíno recuerda que cuando la Stroessner le lanzó en Clorinda sin documento alguno, fue el presidente argentino quien ordenó a su ministro del Interior que le entregue una cédula argentina así como el pasaporte. “En menos de veinticuatro horas ya tenía en mis manos esos documentos, que hasta ahora conservo como un tesoro de la solidaridad democrática de Alfonsín”, dijo emocionado.
Según el dirigente liberal, Raúl Alfonsín siempre se acercó a los luchadores paraguayos y latinoamericanos, con una calidez humana como el verdadero demócrata que era. Asegura que con su muerte toda la América Latina perdió una “bandera”.
Laíno y otros paraguayos habrían sido recibido en varias ocasiones por Alfonsín en la quinta presidencial Olivos. En las reuniones compartía asado con los compatriotas, a quienes exhortaba que el camino de la no violencia era el mejor para lograr la victoria sobre la dictadura de entonces.
Por último, agregó que el argentino era un hombre por sobre todo abierto y conocedor de la causa paraguaya y cuya lucha, admiraba.
Sandino Gill Oporto, colorado antiestronista, indicó que formó parte del Movimiento Latinoamericano Simón Bolívar que acompañó la candidatura presidencial de Alfonsín. Dijo que tiene muy buenos recuerdos de él, aunque reconoció que no tuvo un contacto personal con el ex presidente.
COMUNICADO. El Partido Demócrata Cristiano (PDC) rindió homenaje al que ellos consideran como el “prócer de la democracia latinoamericana”, indican en un comunicado que Alfonsín supo estar a la altura de las circunstancia histórica para gobernar.