“Los datos que disponemos ahora mismo sobre el volumen de escombros que hay, toneladas plagadas de artefactos explosivos no detonados y cadáveres, hablan de que serían necesarios unos 15 años para limpiarlos”, explicó Anguera en una entrevista con EFE.
Aún así, la activista se mostró esperanzada ante un acuerdo “absolutamente necesario” y expresó su deseo de que el anuncio definitivo se haga “lo antes posible”, para poder celebrarlo en base a una situación que ya ha llegado, y no a una “esperanza que tenemos todos”.
Anguera lamentó la “carga emocional” que supone la situación actual para las familias gazatíes, en la que el alto el fuego es “inminente” pero no acaba de llegar, mientras siguen los bombardeos, ataques y violencia hasta el domingo, cuando entra en vigor.
La responsable de la ONG celebró que la primera fase del acuerdo incluya la entrada de ayuda humanitaria en Gaza, aunque prevé que la entrada de 600 camiones diarios en la Franja se queda “muy corta” para dar respuesta a las necesidades de la población.
“Prácticamente, todos los habitantes de Gaza dependen únicamente de la ayuda humanitaria, porque se han tenido que desplazar varias veces y tras 15 meses de conflicto han perdido la capacidad de resiliencia o de generar sus propios ingresos”, explicó. EFE