El curador y crítico de arte Ticio Escobar y el cantautor Ricardo Flecha, quienes firmaron el contundente comunicado (que también lleva la rúbrica de más de 70 representantes de la sociedad civil), donde exigen la renuncia de la fiscala general del Estado, Sandra Quiñónez, afirmaron que existe un hartazgo ciudadano de la titular del Ministerio Pública, a quien acusan de favorecer a los poderosos.
Ambos artistas coinciden que se llegó a un punto muy grave en el que ya no existe Justicia. Manifiestan que si no hay Justicia no puede haber paz, y recalcan que la falta de Justicia es en gran parte responsabilidad de la Fiscalía General del Estado (FGE).
Escobar, también ex ministro de Cultura, aseveró que en este momento crece el hartazgo ciudadano, imposible de soportar en un determinado momento, hacia Quiñónez. “Tenemos un grado de corrupción que está realmente socavando la institucionalidad y la decencia de este país. Y esta señora, como fiscala general, encarna una responsabilidad muy grande, es cuestionable su papel en el caso Messer, la vista gorda ante una gran cantidad de denuncias, esto mismo último que ocurrió con Efraín Alegre”, lamenta Escobar.
Agrega que Quiñónez es una persona de alto rango, una figura pública que encarna una responsabilidad, y está simbolizando, “a partir de un ejercicio real, la desidia, la vista gorda y la corrupción” al salir del lado de los poderosos, al hacer la vista gorda a cuestiones y negocios que son imposibles de tolerar.
“Por esto, ciudadanos y referentes civiles, no directamente de partidos, sino intelectuales, gente de cultura, empresarios, expresan la imagen de una sociedad en general, una preocupación hacia el deterioro de la institucionalidad, en el plano judicial sobre todo. Le pedimos a esta señora que tenga la decencia de renunciar, porque la gente no confía en ella, no solamente no confía, sino que desconfían de ella a partir de situaciones ampliamente probadas. Ella es una funcionaria venal, parcialista, y se vuelve intolerable, está en el centro de la opinión pública. Una persona que pierde la confianza de la ciudadanía tiene la obligación de renunciar”, expresa el crítico de arte.
Detalló que la nota presentada la semana pasada no es una demanda formal, pero es un clamor ciudadano. “¡Por favor, basta! Las autoridades no son capaces de tomar una actitud ante ella, que debería ser realmente sometida a un juicio político y a una investigación, pero la ciudadanía exige que ella tenga la decencia, si es que puede hablarse de decencia en una persona comprometida tan directamente con casos muy sospechosos como el de Messer y Horacio Cartes, existe la desconfianza que ella es títere de Cartes”, apuntó Ticio.
ASUSTA. Escobar afirma que la Fiscalía llegó a un punto de descaro que asusta, por lo que la ciudadanía tiene la obligación de pronunciarse, tomar un papel activo. “No podemos quedar indiferentes”, expresó.
Por su parte, el cantautor Ricardo Flecha precisó que en el Paraguay, para que en realidad funcione la República, tiene que funcionar la Justicia. “Si no hay Justicia no puede haber paz, y no puede haber fraternidad y no puede haber hermandad. Cuando los que mandan son los poderes fácticos, los poderes económicos, por encima del ciudadano normal, común, lo único que le queda al ciudadano es la Justicia, que nos iguala a todos”, reflexionó.
Indicó que precisamente si los encargados de impartir o buscar Justicia, como en este caso Quiñónez, no cumplen con su tarea, sino que apañan ciertos comportamientos irregulares, “nosotros tenemos el derecho de pedir su destitución”.
“Por eso creo que muchos de los ciudadanos ilustres que firman ese comunicado tenemos ese derecho y no solamente tenemos ese derecho, tenemos la obligación, que la ley sea para todos. Quienes no van a estar en consonancia con esto que den un paso al costado”, fustigó.
INVESTIGADA. Es más, Ricardo Flecha opinó que Sandra Quiñónez tiene que ser investigada después de su renuncia o destitución. “Habría que investigar todo su andar, porque en realidad nosotros necesitamos que sean investigadas las personas que no cumplen con sus tareas, y que sean sancionadas si se confirma que han actuado de manera incorrecta. Es la única manera de que funcione la República”, subrayó.
Refirió que hoy tenemos “un país de gua’u”, porque las instituciones no funcionan correctamente en Paraguay. Reiteró que la fiscala general está aplazada y, por lo tanto, está aplazada la Justicia, no solamente la Fiscalía, sino también el Poder Judicial. “Hay un montón de cosas que no funcionan bien en el país. La Justicia tiene que apartarse de la política partidaria y funcionar”, insistió Flecha.
Entre los firmantes de la nota presentada la semana pasada también figuran Berta Rojas, Marcelo Martinessi, Ana Brun, Verónica Serafini, Mabel Causarano, entre otros. Señalaron su preocupación ante el “grave deterioro institucional” a causa de una Fiscalía General “sometida a poderes fácticos”. Indican que las instituciones encargadas de impartir justicia actúan de manera arbitraria y cuestionaron la impunidad de la corrupción pública.