Ante esto, la economista señaló que debe hacerse un urgente reordenamiento de los gastos públicos en el corto plazo, priorizando las inversiones. Ese reordenamiento podría ayudar a generar mayor espacio y ampliar el margen maniobrabilidad del Tesoro para actuar en casos críticos.
Subrayó que el Gobierno debe insistir en las reformas estructurales en las que empezó a trabajar en el 2020, pero que al parecer, están paralizadas por el momento.
Refirió que solo con cambios importantes y de fondo, se podría garantizar la estabilidad macroeconómica a largo plazo y darle una mirada más optimista al sector privado.
