Durante el encuentro hubo micrófono abierto y los presentes condenaron “el intento de atropello por parte del Gobierno” a un espacio de “resistencia y defensa del derecho a la memoria”.
La Plataforma Social Derechos Humanos, Memoria y Democracia fue la encargada de organizar la reunión.
La mayoría de los asistentes mencionaron que la intención de no hacer mención al nombre de la plaza fue un avasallamiento contra la memoria histórica.
La semana pasada, el Centro de Artes Visuales/Museo del Barro criticó a la Oficina de la Primera Dama, a cargo de Leticia Ocampos, por omitir el nombre oficial de la Plaza de los Desaparecidos al comunicar sobre un evento navideño hecho en el lugar.
La Oficina se refirió al mencionado espacio como “Plaza Navidad” para promocionar un evento navideño realizado días pasados, lo que desató una ola de críticas.
En el afiche del evento se tituló el lugar de la actividad como “Plaza Navidad”, una propuesta que ofrecía un mercadillo navideño, Papá Noel, show de luces, golosinas, buzón de cartas, conciertos y shows navideños.
Esta omisión llamó la atención de varias personas, instituciones y espacios, como el Centro de Artes Visuales/Museo del Barro, que expresó su “enérgico rechazo” al cambio de nombre hecho en la ocasión por la Oficina de la Primera Dama.
“La Plaza de los Desaparecidos es un símbolo de la memoria ciudadana, la verdad y la justicia en Paraguay, y recuerda a las víctimas del autoritarismo y el terrorismo de Estado promovido por la dictadura stronista del Partido Colorado”, recordó el Museo del Barro en un comunicado.
RESPUESTA. La Oficina de la Primera Dama aseguró que la Plaza de los Desaparecidos seguirá siendo respetada, así como su valor histórico y social. “El evento denominado Plaza Navidad (entre el miércoles y viernes último) fue una acción puntual”, agregó en un comunicado emitido el día después de la polémica desatada, en el intento por calmar las aguas.
La Oficina, a cargo de Ocampos, aseguró que en ningún momento se cambió el nombre oficial del sitio, al que calificó como un “espacio de profundo significado histórico y simbólico para la memoria ciudadana, la verdad y la justicia en Paraguay”.
Aseguró que “la denominación, así como su valor histórico y social, fueron y seguirán siendo plenamente respetados”. Alegaron que entienden las “preocupaciones expresadas por algunos sectores sobre el significado de este espacio”. Igualmente, hicieron un llamado a la ciudadanía para trabajar juntos en el cuidado y la preservación del citado espacio.