Femme assise en costume vert, que podrá verse en la sede neoyorquina de Sotheby’s a partir del próximo sábado, pertenece a un excepcional grupo de cuadros que el español creó durante el invierno de 1952 y la primavera de 1953, durante el tiempo en que Picasso y Gilot vivieron juntos con sus dos hijos, Claude y Paloma, en la villa La Galloise in Vallauris, en Francia.
La pieza rememora las pioneras composiciones cubistas de Picasso de formas angulares y delineadas, así como los atormentados retratos de otra de las parejas del artista, Dora Maar, pintadas a finales de la década de los 30 y principios de los 40.
El retrato de Gilot, una reconocida artista que el próximo noviembre cumplirá 100 años, se ha visto pocas veces en una subasta, pero en esta ocasión, y dado su carácter excepcional, formará parte de la venta vespertina de Arte Impresionista y Moderno de Sotheby’s el próximo 12 de mayo, considerada una de las más importantes del año.
“Los retratos femeninos de Picasso son como un diario de su vida y de sus amores, y es muy emocionante poder llegar hasta el capítulo de Françoise Gilot, que duró una década y resultó en dos hijos, Claude y Paloma”, explica en un comunicado la jefa del Departamento de Arte Impresionista y Moderno de Sotheby’s, Helena Newman.
“Tras haber sido comprado por el propietario actual en Sotheby’s en 1986, ahora volverá a una sala de subastas, lo que continúa un sólido comienzo del año para el artista, ya que la demanda de su trabajo está siendo más insaciable y global que nunca”, agregó.
Por su parte, Julian Dawes, otro de los directivos del Departamento de Arte Impresionista y Moderno de Sotheby’s, subrayó el hecho de que los retratos de Gilot se ven con mucha menor frecuencia en el mercado que los de otras importantes parejas de Picasso, como Marie-Thérèse Walter y Dora Maar.
Picasso y Gilot se conocieron en 1943 cuando el español tenía 61 años y ella 21, y mientras el malagueño mantenía aún una turbulenta relación con Maar.
La obra de Picasso durante la próxima década, que fue muy prolífica, reflejaría la época de felicidad que vivió con Gilot y sus dos hijos, aunque Femme assise en costume vert se pintó precisamente cuando la relación entre ambos estaba muy deteriorada, y fue terminada solo unos meses antes de que la artista comenzara una vida nueva en París junto a Claude y Paloma.
EFE