Miguel Ángel Russo dejó la dirección técnica de Cerro Porteño en octubre del 2019 y cinco meses después se consagró campeón del fútbol argentino al frente de Boca Juniors. Merecido premio para Russo, al que en el 2017, cuando dirigía a Millonarios de Colombia, se le detectó un cáncer de próstata al que finalmente venció y hoy, con 63 años, se volvió a coronar campeón con el equipo argentino. Es el segundo título local como entrenador en Primera División de Argentina para Russo, ya que en el 2005 se consagró con Vélez Sarsfield. El tercero si sumamos la obtención de la Copa Libertadores con el Xeneize en el 2007.
UN CAMPEONATO ESPECIAL. “Volver a este club fue especial, agradezco a Román (Riquelme), al presidente y a la gente que confiaron en mí, estoy muy feliz”, dijo Russo. El DT no se olvidó de Gustavo Alfaro, el entrenador de Boca en la primera parte del torneo. “Tengo que reconocer que esto es parte de Alfaro, sería injusto decir que es todo mío”, dijo el DT que asumió a comienzos de este año.
“Siempre soñé con este momento”
Junior Alonso se mostró feliz por lograr el título de la Superliga con Boca. El paraguayo mostró una gran solidez en la recta final del campeonato. Además de su presencia en la marca, destacó por la claridad que aportó con su zurda en la salida. “Siempre soñé con este momento, de poder jugar, ser titular, de ganarme un puesto y salir campeón, se dieron todas esas cosas, tardó un poco, pero todo trabajo tiene su recompensa”, fueron las palabras del defensor albirrojo.