El Tribunal de Sentencia, encabezado por el presidente Juan Carlos Rocholl, condenó a un año de cárcel con suspensión de la ejecución de la pena al sacerdote Silvestre Olmedo por haber manoseado a la joven Alexa Torres, en el 2016.
La querella y la Fiscalía pidieron 2 años de prisión, con suspensión de la condena para Olmedo, mientras que la defensa del religioso solicitó absolución de culpa y pena.
Rocholl hizo un recuento de los testigos que fueron escuchados durante el juicio, así como las pruebas testificales y documentales y enfatizó que ha quedado completamente comprobado que existió un hecho de acoso, así como de hostigamiento.
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“Ha quedado plenamente demostrado para el Tribunal, fuera de toda duda razonable, que Silvestre Olmedo ha cometido estos actos impropios de carácter indiscutiblemente sexuales”, sostuvo el juez.
Igualmente, el magistrado comentó que para el Tribunal hay una plena convicción que sí existía una sujeción entre la víctima y el victimario.
En ese sentido, resaltó que “el sacerdote generalmente es la persona guía, es el que le guía a una persona en la Iglesia Católica, e inclusive resuelve varias situaciones sicológicas”.
En cuanto al hostigamiento, señaló que se puede dar varias veces en un mismo acto, tener que estar recibiendo una situación de desagrado, desde todo punto de vista constituye una acción de hostigamiento.
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“Poner la mano sobre los senos y apretar es una invasión de libertad de la persona que recibe, más aún teniendo la desaprobación pasiva o activa de la persona, es un hostigamiento para el Tribunal”, indicó.
El año pasado ya se había hecho un juicio y el Tribunal, integrado por los jueces Leticia De Gásperi, Dina Marchuk y Hugo Segovia, quienes habían absuelto al cura. En tanto, la Fiscalía y la defensa apelaron el fallo del Tribunal, y la Cámara de Apelaciones anuló la absolución del cura y fijó un nuevo juicio para el jueves 23 de setiembre.
Ante esta situación, la Coordinadora de Derechos Humanos del Paraguay (Codehupy) solicitó poder participar de este nuevo juicio como observador del proceso.