10 ene. 2025

Salta el nombre del titular de la Corte en torno a blanqueo de Hijazi

El ciudadano brasileño de origen libanés fue acusado por una supuesta evasión impositiva, pero fue absuelto por un Tribunal, cuyos miembros habían sido recusados por el Ministerio Público.

El presidente de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Antonio Fretes, había integrado en el 2008 la Sala Constitucional que rechazó una acción de inconstitucionalidad planteada por el Ministerio Público en un juicio contra Kassem Mohamad Hijazi, permitiendo su blanqueo.

El ministro Fretes y su hijo Amílcar Fretes Escobar actualmente se ven envueltos en un escándalo, tras aparecer un contrato firmado por el último con Sharif Kassem Hijazi, familiar de Kassem Mohamad, quien el pasado 8 de julio fue extraditado a los Estados Unidos.

El contrato “de prestación de servicios profesionales de abogado” tiene fecha del 30 de setiembre de 2021. En el documento, el hijo de Fretes se obligaba a prestar asesoría a Sharif sobre la situación jurídica de su padre.

Fretes supuestamente debía hallar “una salida jurídica” para que Kassem, o no sea extraditado, o bien, pueda permanecer por más tiempo en el país, según el mismo reconoció a distintos medios de comunicación cuando se supo lo del contrato. Asimismo, admitió que el hijo de Kassem le pidió interceder ante su padre.

Una de las cláusulas bastantes llamativas del acuerdo indica que el mismo tendría una validez de apenas 30 días hábiles, aclarando que, “de no haber una solución de manera a satisfacer al mandante, se procederá al reintegro de lo entregado en concepto de honorarios profesionales”.

Según el contrato, en ese mismo acto, Sharif Hijazi entregó a Fretes la suma de USD 368.000, más de 2.500 millones de guaraníes, en concepto de “honorarios profesionales”. Pero, de acuerdo con el vástago del ministro, no llegó a percibir dicho monto. Precisó que Sharif desembolsó como “adelanto” USD 60.000, pero que la suma quedó depositada con una persona de confianza de su mandante.

BLANQUEO. Antecedentes de un juicio oral y público contra Kassem Hijazi, en el que fue absuelto de los cargos que el Ministerio Público le imputaban, muestran una dudosa actuación de la Justicia.

El ciudadano brasileño de origen libanés había sido acusado junto a otras personas por supuestos hechos punibles contra el erario. Hijazi era señalado por una supuesta evasión impositiva de 5 millones de dólares.

En diciembre de 2007, en el marco del juicio, el entonces fiscal Eduardo Cazenave recusó al Tribunal que estaba integrado por Ana María Arrellana, Efrén Jiménez y Graciela Flores, alegando que estos habían intervenido en el juzgamiento de otros coacusados, quienes fueron absueltos al excluir dicho tribunal pruebas fundamentales, y que nuevamente no incluirían en el juicio pruebas conducentes a la condena de Hijazi, es decir, había fundadas sospechas de blanqueo del caso. Pero, la recusación fue rechazada, por lo que Cazenave planteó una acción de inconstitucionalidad ante la Corte.

En la máxima instancia judicial tampoco prosperó la inconstitucionalidad. Por Acuerdo y Sentencia N° 819 de fecha 16 de setiembre de 2008, los ministros de la Sala Constitucional Víctor Núñez (Presidente), Antonio Fretes y Raúl Torres Kirmser, resolvieron no hacer lugar a la acción de inconstitucionalidad, por improcedente. El abogado Cazenave en aquél entonces sucedió a los fiscales Juan Carlos Duarte y Adolfo Marín, quienes habían acusado a Hijazi bajo los cargos de lavado de dinero, asociación criminal y evasión impositiva.


Fretes abrió “paraguas” durante sesión, meses atrás
El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Antonio Fretes, afirmó que no tenía conocimiento del acuerdo que existía entre su hijo y un familiar de Kassem Mohamad Hijazi, extraditado a EEUU. Sin embargo, ya el 20 de julio de 2022, durante la sesión plenaria de la Corte, Antonio Fretes “abrió paraguas” manifestando que desautorizaba a todos, incluyendo a sus hijos, a que lo nombren ante cualquier autoridad, institución pública o persona.
Amílcar Fretes firmó un contrato de “prestación de servicios profesionales de abogado” con Sharif Kassem Hijazi, a quien debía asesorar sobre la situación jurídica de su padre, Kassem Hijazi, extraditado en julio pasado. El vástago del ministro admitió que le pidieron interceder ante su padre. “Lo que me pide Sharif es que yo hable con mi padre para ver si es que él podía ayudarnos, a lo que yo le dije que no; que él no iba a acceder, que él no estaba ni en conocimiento del contrato que yo había firmado”, había dicho.