25 abr. 2025

Santos Simón y Judas Apóstoles

Hoy meditamos el Evangelio según Lucas 6, 12-19.

“[Jesús] salió al monte a orar y pasó toda la noche en oración a Dios. Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos y de entre ellos eligió a doce”. Como a Simón y Judas, el Señor nos llama a cada uno a compartir la alegría del Evangelio con la propia vida.

Al igual que en otras ocasiones, el Evangelio de hoy nos muestra la conducta del Señor antes de algún acontecimiento importante: se retira a orar. En este caso pasa la noche en oración. “Cuando se hizo de día” reunió a los discípulos y, de entre ellos, eligió a los doce apóstoles. Ellos serán los testigos de las obras de Jesús y los que le darán continuidad.

El día de hoy celebramos a dos de esos doce elegidos: a Simón y Judas Tadeo (solo Lucas lo llama Judas de Santiago, a diferencia de Mateo y Marcos que lo llaman Tadeo). Es notable la diferencia que se hace entre los discípulos y el grupo de los doce, de los Apóstoles. Será sobre ellos, sobre esas doce columnas, sobre las que el Señor articulará y construirá su Iglesia.

El Señor elige a los Apóstoles y les da el poder de continuar con la obra de la salvación, y los envía, como recuerda el Concilio Vaticano II, «a todos los pueblos para que, participando de su potestad, hicieran a todos los pueblos sus discípulos, los santificaran y los gobernaran, y así extendieran la Iglesia y estuvieran al servicio de ella como pastores bajo la dirección del Señor, todos los días hasta el fin del mundo».

La fiesta y el evangelio del día de hoy nos puede servir para aumentar nuestro amor a la Iglesia de Cristo, que es apostólica porque ha sido fundada sobre los doce apóstoles; quienes, desde el comienzo, instituyeron a sus sucesores –los obispos–.

(Frases extractadas de https://opusdei.org/es-py/gospel/2022-10-28/)