“Una vez me pegó por la cara y le dije, ‘cuidado, mi anteojo’, y ella me dice, ‘sacate, estúpida’, le dije que no me pegue por la cara y me respondió, ‘creés que te voy a pegar donde va a dejar rastro’”, contó llorando Sara Servián a Última Hora.
La voluntaria confirmó los problemas que está teniendo en su casa, especialmente con su sobrina María Graciela, a quien cuidó desde niña, pero que hace algunos años, “cambió totalmente”.
El cambio empezó cuando la joven conoció a su actual pareja, Patricio Ortiz, a quien Servián calificó de adicto y violento.
Relató que desde el primer momento se opuso a la relación de ambos, por lo que en varias ocasiones fue amenazada por el joven y le costó el alejamiento de su sobrina, quien también consume drogas, según dijo Servián.
“No quiero dejar mi casa, quiero estar acá y tener seguridad”, pidió la mujer.
Agregó que la pareja la encerraba, la golpeaba e insultaba constantemente, y que incluso llegó a tener a su cargo durante un tiempo el comedor, teniendo total y libre acceso al dinero y a las donaciones.
No permitían que los familiares y vecinos la visitaran, la encerraban en la casa sola, sin contacto con nadie, aprovechando que por su estado de salud ya no puede caminar.
Por su parte, Luis Calderón, de la Organización Socorro, comentó que ya accionaron judicialmente y que solo esperan que se haga efectivo el fallo de un juez prohibiendo que la pareja vuelva a ingresar al domicilio.
Después de que se supiera el calvario que la mujer vivía en su propia casa, este domingo varios amigos y familiares la visitaron y tomaron medidas.
La denuncia la realizó ante el Ministerio Público César Manuel Servián, sobrino de doña Sara, quien además pide su custodia.
El estado de salud de la encargada del comedor no es delicado, presenta un cuadro de trombosis y artrosis, por lo que ya no puede caminar y permanece en cama; además, sufre de un principio de alzheimer.