El gremio empresarial que nuclea al 75% de las empresas que operan en servicio de transporte público en el área metropolitana presentó ante el Ministerio del Trabajo cinco puntos en los que se fundamenta el paro. Uno de ellos es el pago de los subsidios atrasados, el pedido de actualización de coeficientes para el cálculo del precio del pasaje, el traspaso de los montos de subsidios a los pasajeros, la renovación de licencias para empresas que cumplen los requisitos y un reclamo por presunta manipulación por parte del Gobierno.
César Ruiz Díaz reconoció que el Gobierno se está poniendo al día con el pago de los subsidios. Dijo que solo algunas pocas empresas son las que aún no recibieron los desembolsos atrasados. Asimismo, explicó que se acordó respetar las normativas vigentes para las renovaciones de licencias a las empresas que cumplen con los parámetros. Recordemos que los empresarios piden que estas sean por 7 años y el Gobierno plantea que sean por 18 meses, de modo a que se pueda llevar adelante la reforma.
IMPASE. El empresario explicó que los dos puntos sobre los que aún no hay un acuerdo para levantar el paro son la actualización de coefientes y el traspaso del subsidio a los pasajeros. “Creo que sobre esos puntos es lo que el Gobierno está más complicado a la hora de encontrar una salida”, expresó.
Respecto al traspaso de los subsidios a los pasajeros, Ruiz Díaz dijo que se cuenta con la capacidad tecnológica para hacerlo y consideró que solo basta realizar una planificación con el Ministerio de Tecnología de la Información y Comunicación (Mitic).
“Podemos sentarnos en una mesa y en 60 días definir cuál será el mecanismo para encontrar una solución. Este pedido se fundamenta en que el retraso constante en los pagos del subsidio por parte del Gobierno generar una inestabilidad financiera en las empresas”, dijo.
Con respecto a la reforma del transporte anunciada por el Gobierno, el representante de Cetrapam dijo que no conoce los alcances de esta y que solo opinará al respecto una vez que las autoridades les convoquen a la mesa técnica en la que será presentado el documento.
Por su parte, el viceministro del Transporte, Emiliano R. Fernández, había dicho durante una entrevista con Última Hora que pasar los montos del subsidio a los pasajeros requiere del trabajo interinstitucional y no se puede realizar como un “arte de magia”.
Por otro lado, señaló que la compra de 1.000 buses eléctricos por parte del Gobierno no será una solución a la calidad del sistema hasta que se establezca un plan maestro que permita que el sistema sea sostenible en el tiempo.
“Recordemos que en el 2014 se compraron unos 280 buses con aire, pero estos están a punto de ser obsoletos debido a que no se estableció un sistema de sostenibilidad”, enfatizó.
La intención del Gobierno es que el 50% de la flota de buses sea eléctrica para dentro de los próximos 4 años, cuando 800 unidades que operan en el área metropolitana cumplan 20 años de antigüedad. La propuesta es que las unidades nuevas sean arrendadas a las firmas que operan el servicio.